(CNN) – Siete días. Ese es el tiempo que tardó el Dow en pasar de los 25.000 a los 26.000 puntos.
El último hito del mercado, alcanzado el martes justo después de la campana de apertura, establece fácilmente el récord del alza más rápida entre las barreras de 1.000 puntos. El Dow ha existido por 121 años.
El Dow se ha disparado casi 8.000 puntos, o alrededor del 42%, desde la elección del presidente Trump. El boom bursátil refleja una enorme expectación en Wall Street por las ganancias récord de las empresas y el fuerte crecimiento económico en el país y en el extranjero, todo lo cual podría verse impulsado por la reforma fiscal del Partido Republicano.
“El mercado ciertamente ha empezado bien rápidamente en 2018 tras un estelar 2017”, dijo Art Hogan, estratega jefe de mercado de Wunderlich Securities.
Es cierto que lograr los hitos de 1.000 puntos es más fácil en estos niveles elevados. Sobre una base porcentual, no es un alza tan grande como lo fue pasar de 10.000 a 11.000.
Aún así, el implacable aumento está generando preocupación, incluso entre algunos inversionistas que le apuestan al alza, de que las cosas se están saliendo de control.
Ed Yardeni, presidente de asesoramiento de inversiones Yardeni Research, dijo a los clientes en un informe el martes que cree que el mercado está en un “melt-up” (una mejora considerable e inesperada en el desempeño). Es un aumento rápido de los precios basado en la emoción, miedo a perder la oportunidad de ganancias, en lugar de fundamentales tradicionales.
“No soy un gran admirador de melt-up”, escribió Yardeni. “Tienden a ser seguidos por colapsos”.
Michael Block, estratega jefe de mercado de Rhino Trading Partners, dijo que el “miedo a perderse (las ganancias) es resonante”, sino “gritar”.
“Solo me pregunto si esto es demasiado y muy rápido”, escribió Block en una nota el martes.
Algunas acciones han subido incluso más que el Dow desde la elección de Trump. Amazon ha aumentado un 66%, Netflix ha subido un 78%, y Nvidia se ha disparado un 218%. No es solo tecnología. Hay que ver el aumento del 83% del Bank of America o el aumento del 93% de Best Buy.
Hogan dijo que, en muchos sentidos, los inversionistas están luchando por reaccionar a la ley tributaria, la cual establece un enorme recorte impositivo a las empresas y un obsequio a Wall Street. Debería ahorrarles a las empresas miles de millones de dólares, evitándoles recompensar a los inversores con recompras de acciones, dividendos y fusiones y adquisiciones.
“Estamos empezando a ver que las empresas estadounidenses nos dicen lo que significa una tasa más baja de impuestos corporativos. No debemos descartar eso”, dijo Hogan.
Sin embargo, Hogan dijo que los inversores, especialmente los que se perdieron una parte del rally del alza, se sentirían más cómodos si las acciones finalmente tomaran un respiro.
El S&P 500 no ha disminuido un 3%, ni en un solo día ni en varios días, desde principios de noviembre de 2016. Ese es el período de calma más largo de la historia, según Bespoke Investment Group.
Más impresionante aún: el S&P 500 no ha sufrido un retroceso del 5% desde junio de 2016, semanas antes de que Trump obtuviera la nominación presidencial republicana. Es la segunda racha más larga de la historia, según LPL Financial.
Dan Suzuki, estratega senior de acciones de Estados Unidos en Bank of America Merrill Lynch, cree que el mercado está experimentando un “melt-up” y que el sentimiento de los inversores se acerca a la “euforia”, aunque aún no ha llegado.
Suzuki dice que la historia muestra que los mercados alcistas típicamente terminan con notas muy, muy fuertes. Este mercado alcista comenzó en marzo de 2009, cerca del final de la Gran Recesión.
El S&P 500 se ha cuadruplicado desde su punto bajo durante el mercado a la baja. Pero las ganancias se han acelerado claramente desde la elección de Trump.
“Es un rally extremadamente impresionante”, dijo Suzuki. “Es bastante indicativo de lo que se ve al final de los mercados alcistas cuando el sentimiento está en el asiento del conductor”.