(CNN) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cree que se le debe un poco de crédito a la economía más fuerte del planeta… y probablemente esté en lo cierto.
Recién llegado de un viaje por las tierras centrales del Medio Oeste, el presidente está tomando el mejor caso posible para su Gobierno mientras se calienta el ambiente antes de las elecciones intermedias en Estados Unidos. Él está dando a los cuatro vientos un mensaje de una economía fuerte con el fervor de que los demócratas aún no hayan coincidido en este ciclo de elección.
Normalmente se culpa demasiado a los presidentes cuando la economía va mal, ya que las caídas a menudo son causadas por choques externos o factores cíclicos, pero eso también les da la oportunidad de pavonearse cuando las cosas avanzan a toda máquina.
Trump no es el tipo de persona que dejaría pasar esta oportunidad.
Usualmente, la evaluación hiperbólica del presidente sobre su propio desempeño va en desacuerdo con los hechos. Pero la revelación de los números de crecimiento del PIB del segundo trimestre revelados este viernes le podrían dar una causa genuina de celebración, basados en números reales irrefutables.
Esta también podría ser su mejor oportunidad de argumentar que el recorte de impuestos grande y controversial, que es la única legislación significativa que él ha logrado que se apruebe, está desencadenado prosperidad.
“Nunca hemos visto algo como esto que está pasando ahora mismo”, dijo Trump ante una multitud de partidarios de trabajadores del acero en Illinois este jueves.
El crecimiento económico de Estados Unidos para el segundo trimestre se puso en una tasa de 4,1% anual, dijo el Gobierno el viernes. Fue su mejor desempeño desde el tercer trimestre de 2014.
De acuerdo con muchos indicadores, la economía de Estados Unidos se encuentra en excelente forma: el desempleo está cerca de su mejor mínimo en 18 años, las fábricas tienen más pedidos y las exportaciones están aumentando.
Buscando un impulso
Una cifra fuerte de crecimiento le debería dar a la Casa Blanca un impulso significativo días después de una serie de titulares sombríos y su incapacidad para salir de la humillante cumbre del presidente Donald Trump con su homólogo de Rusia, Vladimir Putin, hace unas semanas.
También debería darle un respiro personal a Trump, dado que debe estar sintiendo que las paredes legales están cerrándose a su alrededor, después de la noticia de que uno de sus más cercanos confidentes, Allen Weisselberg, ha sido citado por fiscales federales que investigan a su exabogado Michael Cohen.
The New York Times reportó este jueves que el fiscal especial para la trama rusa, Robert Mueller, está examinando los tuits de Trump por si estos pueden ayudarlo potencialmente a construir un caso en el que el presidente actuó con maliciosa intención cuando despidió al entonces director del FBI, James Comey.
Como siempre, Trump tratará de cambiar el tema. Con el actual estado de la economía, puede tener algo de munición.
La cifra de desempleo está en su punto más bajo en décadas, las ganancias corporativas están fuertes y parece poco probable que se avecine una crisis repentina que pueda descarrilar las cosas antes de que los estadounidenses vayan a las urnas en las elecciones intermedias que tendrán una gran influencia en la presidencia de Trump.
Encuestas recientes muestran que la economía es uno de los pocos temas en los que Trump se está acercando a números que los presidentes usualmente necesitan para ganar la reelección.
Una encuesta de la Universidad Quinnipiac hecha entre el 18 y 23 de julio muestra que las mayorías de los votantes piensan que Trump había debilitado a Estados Unidos en el exterior, que era muy cercano a Putin y que mintió sobre temas importantes. Pero un 49% respaldó el manejo de la economía.
Las esperanzas de los republicanos mantener a raya una ola azul demócrata e impulsar los prospectos de la reelección de Trump en 2020 pueden depender de que más votantes decidan que, a pesar del alboroto, las dislocaciones y las falsedades de la presidencia de Trump, él les ha traído más seguridad económica y ha aumentado sus paga, lo que han esperado por años.