(CNN) – Las autoridades de Indonesia dijeron este domingo que al menos 844 personas murieron por el poderoso terremoto y tsunami que sacudieron la isla de Sulawesi.
Dos días después del sismo de magnitud 7,5 que sacudió la isla, la cifra de muertos ha aumentado continuamente y las autoridades dicen que todavía podrían aparecer más cadáveres.
Sutopo Purwo Nugroho, portavoz de la Agencia de Manejo de Desastres de Indonesia, estima que 2,4 millones de personas fueron afectadas por el sismo del viernes.
Nugroho dijo que 71 extranjeros se encontraban en la ciudad de Palu al momento del terremoto y que la mayoría fueron evacuados a Yakarta. Al menos cinco extranjeros, incluyendo tres ciudadanos de Francia, uno de Malasia y uno de Corea del Sur, están desaparecidos, dijo.
Hasta el domingo no había reportes de ciudadanos estadounidenses afectados por el sismo, dijo a CNN la Embajada de Estados Unidos en Yakarta.
Los sobrevivientes caminaban en medio de pilas de escombros e inundaciones. Un centro comercial terminó en escombros y el gran domo de una mezquita colapsaron en Palu, de 350,000 habitantes.
Las familias llevaban en bolsas de plástico y mochilas las pocas pertenencias que pudieron recuperar a los refugios al aire libre donde miles de personas esperaban por ayuda.
Cientos de personas resultaron heridas y al menos 17.000 se quedaron sin hogar, dijo Nugroho.
La falta de maquinaria pesada y personal ha frenado los esfuerzos de rescate en la ciudad costera de Palu, donde los trabajadores luchaban el domingo para rescatar a unas 50 personas atrapadas entre los restos de un hotel derrumbado.
El presidente de Indonesia, Joko Widodo, llegó a Palu el domingo para revisar las áreas afectadas.
“Le pido a todos ustedes que trabajen día y noche para completar las tareas relacionadas con la evacuación. ¿Están listos?”, le preguntó al ejército del país.
‘Podría ser mucho peor’
Mientras Widodo visitaba Palu el domingo, la escala de destrucción dejada por el terremoto seguía siendo poco clara.
El servicio eléctrico y las comunicaciones fueron interrumpidos y las carreteras estaban severamente dañadas o bloqueadas por deslizamientos de tierra, lo que hacía más difícil evaluar el daño, dijo Nugroho.
Jan Gelfland, director de la Cruz Roja Internacional en Indonesia, dijo que la ayuda iba en camino a las localidades pesqueras de Donggala y Mamuju, dos áreas que se teme hayan quedado devastadas.
La “Cruz Roja de Indonesia se está apresurando para ayudar a los sobrevivientes, pero no sabemos lo que encontrarán ahí”, dijo Gelfland.
“Esta ya es una tragedia, pero podría ser mucho peor”.
Con el aeropuerto de Palu cerrado, los socorristas tienen que llegar al lugar por tierra. Sulawesi es una de las islas más grandes del mundo y conducir desde el aeropuerto más cercano toma entre 10 y 12 horas.