(CNN) – Altos funcionarios del gobierno Trump han presionado a las agencias de inteligencia de Estados Unidos para investigar el origen del nuevo coronavirus y “buscar pruebas” que vinculen el virus a un laboratorio de China, reportó este jueves el diario The New York Times.
The New York Times, que destacó que las “agencias de inteligencia permanecen escépticas frente a que se puedan hallar evidencias concluyentes de un vínculo a un laboratorio”, reportó que el secretario de Estado Mike Pompeo, el asesor adjunto de seguridad nacional Matthew Pottinger y Anthony Ruggiero, un funcionario del Consejo de Seguridad Nacional, están entre aquellos que han presionado para que las agencias encuentren una conexión.
Según el diario, Pompeo ha “tomado la iniciativa” al pedir más información acerca del posible vínculo, mientras que Pottinger “ha presionado a las agencias de inteligencia desde enero para recopilar información que pueda apoyar cualquier teoría de origen vinculada a un laboratorio”. Por su parte, Ruggiero “expresó frustración” durante una llamada ese mismo mes cuando la CIA no pudo respaldar ninguna teoría sobre el origen del virus, añadió la publicación.
El periódico señaló que “algunos analistas de inteligencia están preocupados acerca de que la presión de los funcionarios del gobierno distorsione las evaluaciones sobre el virus y que pueda ser utilizada como un arma política” contra China, país al que el presidente Donald Trump ha tratado de culpar por el covid-19 que hasta ahora ha cobrado la vida de más de 230.000 personas en todo el mundo.
La dependencia del director interino de Inteligencia Nacional Richard Grenell señaló en un comunicado este jueves que la comunidad de inteligencia “continuará examinando rigurosamente la información e inteligencia que surja para determinar si el brote comenzó a través del contacto con animales infectados o si fue el resultado de un accidente en un laboratorio en Wuhan”.
El pronunciamiento también sostuvo que la comunidad de inteligencia “coincide con el amplio consenso científico de que el virus covid-19 no fue creado por el hombre ni modificado genéticamente”.
CNN informó a principios de este mes que un funcionario de inteligencia familiarizado con el análisis del gobierno reveló que el personal de inteligencia de EE.UU. está investigando una teoría de que el virus se originó en un laboratorio en Wuhan, China, y fue liberado accidentalmente.
Dicha teoría ha sido impulsada por los partidarios del presidente, incluidos algunos republicanos del Congreso, que están ansiosos por desviar las críticas sobre el manejo del gobierno ante la pandemia.
Otras fuentes le dijeron a CNN que la inteligencia de EE.UU. no ha podido corroborar la teoría, pero que intenta discernir si alguien resultó infectado en el laboratorio por un accidente o por un manejo inadecuado de los materiales y pudo haber infectado a otros.
Pero la teoría es una de las múltiples en las que indagan los investigadores, mientras intentan determinar el origen del coronavirus. Estados Unidos no cree que el virus esté asociado con la investigación de armas biológicas y las fuentes indicaron que actualmente no hay indicios de que el coronavirus haya sido fabricado por el hombre.
The New York Times dijo en su informe que los funcionarios de la comunidad de inteligencia “han señalado repetidamente a la Casa Blanca que determinar los orígenes del brote es fundamentalmente una cuestión científica que no puede resolverse fácilmente mediante espionaje”.
Josh Campbell, Kylie Atwood y Evan Perez, todos de CNN, contribuyeron a este informe.