(CNN) – Eric Attayi, propietario de la Urban Bicycle Gallery, en Houston, Texas, ha visto cómo la pandemia transformó su tienda de una manera que la mayoría de las empresas solo pueden soñar.
Las bicicletas se venden antes de que tenga tiempo de armarlas para exhibirlas. Attayi dijo que, para principios de mayo, había igualado sus ventas de 2019. Ha tenido que contratar nuevos empleados para satisfacer la demanda, y no se ha tomado un día libre desde febrero. Attayi dijo que había hecho aumentos de salario y comenzó a comprar almuerzos para su estresado personal.
A medida que el desempleo alcanza niveles récord y las pequeñas empresas luchan por sobrevivir, las tiendas de bicicletas han sido una excepción.
Están prosperando ya sea en ciudades dominadas por automóviles como Houston y Los Ángeles o en áreas de ciclismo más tradicionales como Portland, Oregon, Nueva York y Washington. Mantener suficientes bicicletas en stock y terminar las reparaciones de manera oportuna se ha convertido en un desafío. A los clientes los están rechazando, en algunos casos.
Una encuesta reciente de la National Bicycle Dealers Association descubrió que el 83% de las tiendas están preocupadas por sus niveles de inventario. Los fabricantes de bicicletas están luchando por mantenerse al día.
“Por lo general, somos una tienda bastante lenta y relajada”, dijo Attayi. “Ahora el teléfono no deja de sonar. Mis muchachos se sienten abrumados y lo entiendo totalmente”.
Los nuevos clientes buscan formas de estar activos y al aire libre. Los propietarios de tiendas de bicicletas dicen que el cierre de gimnasios y estudios de yoga durante la pandemia ha contribuido a su auge. Otros dicen que los clientes están buscando una alternativa de transporte diferente al transporte público. El distanciamiento físico es más fácil en los modos de transporte individuales, como los automóviles y las bicicletas. En marzo de 2020, las ventas de bicicletas en Estados Unidos aumentaron un 39% en comparación con marzo de 2019, según el Grupo NPD, que rastrea las ventas minoristas.
“Las bicicletas son como el nuevo papel higiénico”, dijo Attayi. “Si están disponibles, compra una”.
Garfield Cooper, propietario de ZenCog Bicycle Company, en Jacksonville, Florida, tiene mecánicos adicionales trabajando para tratar de mantenerse al día con una acumulación de reparaciones. Las reparaciones que generalmente se realizan en 24 horas ahora requieren hasta un mes. Cooper, como Attayi, dijo que no había tenido un día libre desde febrero.
Si bien sus ventas generalmente disminuyen en los meses de verano, con el aumento del calor y la humedad, Cooper dijo que aún no ha visto un retraso en el negocio.
“Ha pasado mucho tiempo desde que la bicicleta ha sido tan importante para el pueblo estadounidense”, dijo Cooper. “Es genial que estén interesados en andar en bicicleta”.
Él está luchando por mantener disponibles cosas como asientos de bicicleta y cascos. Cooper dijo que regularmente llama a otras tiendas para encontrar las piezas que necesita para reparaciones.
Robert Keating, propietario del Triathlon Lan, en las afueras de Los Ángeles, dijo que nunca había visto nada como el auge actual de la bicicleta en los 37 años que ha trabajado en tiendas de bicicletas. Ha cambiado su tienda de un enfoque en las bicicletas de alta gama a bicicletas asequibles que la gente pueda usar en su vecindario. Las bicicletas de playa han sido especialmente populares, dijo.
“Algunas personas dicen ‘es una gran alegría volver a estar en mi bicicleta. No puedo creer que la haya abandonado por tanto tiempo’”, dijo Keating. “Algunas personas dicen ‘No puedo creer lo difícil que es conducir. Voy a recuperar mi fuerza’”.
Los propietarios de tiendas de bicicletas también se preguntan cuánto durará el auge actual. Algunos dijeron que los clientes estaban más interesados en andar en bicicleta porque con menos tráfico de automóviles, las carreteras se sentían más seguras. Su interés puede disminuir a medida que regresa el tráfico. Pero algunas ciudades han comenzado a reasignar el espacio de las calles a los carriles para bicicletas, lo que podría conducir a más ciclismo a largo plazo.
Aproximadamente 600 kilómetros de carriles para bicicletas protegidas se han construido en Estados Unidos en la última década, según el grupo de defensa People for Bikes.
Phil Koopman, propietario de BicycleSpace, en la ciudad de Washington, comparó el auge actual de las bicicletas con 1999, cuando muchas personas compraron computadoras para prepararse para lo que se llamó error del milenio o Y2K.
“Entonces esas compañías no vendieron muchas computadoras por unos años porque todos ya tenían una”, dijo Koopman. “Esa es la gran pregunta. ¿Es una cosa de una sola vez o es algo sostenible?”.