(CNN) – Las imágenes satelitales de los estacionamientos de hospitales en Wuhan, así como las tendencias de búsqueda en Internet, muestran que el coronavirus puede haberse propagado en China a principios de agosto pasado, según un nuevo estudio de la Facultad de Medicina de Harvard.
El estudio, que aún no ha sido visto por pares, encontró un número significativamente mayor de automóviles en estacionamientos en cinco hospitales de Wuhan a fines del verano y otoño de 2019 en comparación con el año anterior; y un aumento en las búsquedas de palabras clave asociadas con una enfermedad infecciosa en el motor de búsqueda Baidu de China.
Armar un rompecabezas complicado
Los investigadores vieron “un fuerte aumento en el volumen a partir de agosto de 2019 y que culminó con un pico en diciembre de 2019”, escribió el equipo, dirigido por el jefe de innovación del Boston Children’s Hospital, John Brownstein, en una preimpresión publicada en el servidor DASH de Harvard.
Utilizando imágenes de octubre de 2018, los investigadores contaron 171 automóviles en los estacionamientos de uno de los hospitales más grandes de Wuhan, el Hospital Tianyou. Un año más tarde, los datos satelitales mostraron 285 vehículos en los mismos lotes, un aumento del 67% y un aumento del tráfico del 90% durante el mismo período en otros hospitales de Wuhan.
“Los hospitales individuales tienen días de alto volumen relativo tanto en otoño como en invierno de 2019. Sin embargo, entre septiembre y octubre de 2019, cinco de los seis hospitales muestran su volumen diario relativo más alto de la serie analizada, coincidiendo con niveles elevados de consultas de búsqueda de Baidu para el “diarrea” y “tos”, escribieron.
“Se trata de tratar de armar un rompecabezas complicado de lo que estaba ocurriendo en ese momento”, dijo Brownstein a CNN.
“Los datos en realidad son especialmente convincentes porque vimos aumentos en las personas que buscan enfermedades gastrointestinales, diarrea, que aumentaban a un nivel que no habíamos visto en absoluto, históricamente, y ahora sabemos que los síntomas gastrointestinales son realmente marcador importante para covid “, agregó. “Un gran porcentaje de personas que en realidad terminaron dando positivo en Wuhan en realidad habían presentado síntomas de diarrea”.
Vigilancia satelital de enfermedades infecciosas
El uso de “flujos de datos validados” para la vigilancia de enfermedades respiratorias no es nuevo y también es una técnica empleada por las agencias de inteligencia.
“Los estacionamientos de hospitales como de los negocios pueden ser un indicador relativo de algo que sucede en una población”, dijo Brownstein. “En realidad, publicamos esto hace años, donde mostramos que los hospitales en América Latina estaban súper ocupados durante la temporada de gripe. Se podía predecir la temporada de gripe simplemente mirando los estacionamientos”.
Y esa fue la idea en este estudio, dijo.
“Ahora no podemos probar claramente qué estaba impulsando algunas de estas señales, pero se agrega a una creciente evidencia de que algo estaba sucediendo antes de cuando se reconoció oficialmente”, dijo.
“Si bien no podemos confirmar que el aumento de volumen estuvo directamente relacionado con el nuevo virus, nuestra evidencia respalda otro trabajo reciente que muestra que la emergencia ocurrió antes de la identificación en el mercado de Huanan Seafood”, según Brownstein y su equipo. “Estos hallazgos también corroboran la hipótesis de que el virus surgió naturalmente en el sur de China y potencialmente ya estaba circulando en el momento que se produjo el grupo de contagios en Wuhan”.
También es fácil pasar por alto los primeros signos de una pandemia, dijo Brownstein. “Si sucedió lo mismo en EE. UU., es muy posible que también podamos haber pasado por alto estas señales. Así que creo que se trata de la idea de que necesitamos fortalecer nuestros esfuerzos de salud pública y también fortalecer nuestra vigilancia de salud pública”.
Estados Unidos descubrió a principios de enero que una epidemia respiratoria se estaba extendiendo a través de Wuhan, pero pasarían semanas antes de que se identificara el primer caso en EE. UU., en Seattle, y el gobierno federal comenzaría a tomar cualquier medida.
“También tenemos los desafíos de la falta de pruebas en este país, por lo que probablemente también se pasaron por alto las señales aquí, de que la transmisión estaba ocurriendo y tampoco lo sabíamos”.
Desde entonces, más de 7 millones de personas han sido infectadas con el virus mortal en todo el mundo, según la Universidad Johns Hopkins, con más de 404.000 muertes globales y más de 110.000 muertes en los Estados Unidos.