Un hospital en Galveston, Texas continuará atendiendo a un imigrante ilegal paralizado luego de caer del techo donde trabajaba.
Según sus familiares, el hospital había ofrecido pagar su regreso a México para continuar su tratamiento, ya que él no cuenta con seguro médico para cubrir sus gastos.
En agosto pasado, Francisco Martínez se cayó de una escalera cuando reparaba el techo de un negocio camaronero en Galveston.
Fue en el hostpital de la Universidad de Texas en Galveston donde recibió tratamiento que le salvó la vida y permanece desde entonces paralizado desde el pecho para abajo.
El hospital ofreció pagar los gastos de traslado aéreo, pero la familia rechazó la oferta.
A través de un comunicado, el hospital dice haber cumplido su obligación legal de ayudar a Martínez en la situación de emergencia, pero que tiene el derecho de trasladarlo a otra entidad médica cuando el paciente esté en condición estable.
Brandi Cullen Valderrama, pareja de Martínez, dice que desde que la historia se hizo pública el hopital ha cesado en su presión.
Por su parte, una vocera del consulado mexicano en Houston dijo que su gobierno está listo para recibir a Martínez si este así lo desea y recibiría atención gratuita a través del sistema de hospitales públicos.
Joe Compian, quien representa un grupo religioso que ayuda a Martínez dice que esta opción no es viable porque los hospitales mexicanos no están preparados para lidiar con casos como este.
Compian agregó que su organización tendrá en los próximos días un lugar en el que Martinez pueda continuar su tratamiento junto con su familia la cual ha vivido en un albergue desde que sucedió el accidente.
(Con información de Gustavo Valdés.)