Por Kevin Flower, CNN
Jerusalén (CNN) — El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, defendió este miércoles la decisión de su gobierno de acelerar la construcción de nuevas viviendas en el este de Jerusalén.
“Continuaremos construyendo en Jerusalén. Es nuestro derecho y obligación”, dijo Netanyahu durante una ceremonia conmemorativa en el Parlamento en honor al exministro de Turismo, Rehavam Ze’evi, asesinado por militantes palestinos hace una década.
“Éste no es un castigo, es nuestro derecho nacional de construir nuestra capital. Garantizo que nunca regresaremos a la situación que teníamos en la noche previa a la Guerra de los Seis Días”, dijo Netanyahu.
Sus palabras ocurren un día después de que su gobierno anunció que acelerará la construcción de 2.000 unidades habitacionales en el este de Jerusalén y en la ocupada Ribera Occidental del Jordán, y que suspenderá la transferencia de recaudación de impuestos a los palestinos, luego de que la UNESCO aprobó la incorporación de los territorios palestinos a la organización.
El ministro británico de Exteriores, William Hague, emitió un comunicado este miércoles condenando las medidas israelíes, a las que calificó de “un serio golpe a los esfuerzos del cuarteto (de Medio Oriente) para reiniciar las negociaciones de paz”.
“Este programa de construcción es ilegal bajo la ley internacional y es el último de una serie de provocativos e inútiles anuncios de asentamientos”, afirmó Hague.
La construcción ocurrirá en aéreas que se espera sean parte de territorio israelí en cualquier acuerdo de paz futuro, y no hay contradicción entre éste y varios planes de paz que han sido discutidos, afirmó un funcionario israelí.
Los palestinos reclaman la tierra que Israel ocupó en el este de Jerusalén y en la Ribera Occidental del Jordán luego de la guerra de 1967 como parte de un futuro Estado palestino.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, ha dicho en repetidas ocasiones que los palestinos no regresarán a las negociaciones con Israel hasta que se detengan las construcciones de asentamientos y se acepten las fronteras que estaban antes de la guerra de 1967.
Israel mantiene que las negociaciones no pueden comenzar con precondiciones.