(CNN) — La NASA lanzó este sábado un cohete que lleva a “Curiosity”, el vehículo todoterreno más sofisticado que jamás haya enviado a Marte, con un enfoque primario: la búsqueda de evidencias de vida en el planeta rojo.
Con su lanzamiento desde cabo Cañaveral, “Curiosity” comenzó un viaje de ocho meses y medio y a partir de agosto de 2012, el vehículo recolectará rocas del suelo del planeta rojo para ver si hay señales de vida -en forma de materia orgánica.
“Curiosity” es capaz de detectar material orgánico necesario para la vida tal como la conocemos. Por primera vez, la NASA va a Marte con un enfoque primario en la búsqueda de vida.
“Esta misión es un paso clave para responder a la pregunta final de si alguna vez existió vida en Marte”, dijo el científico adjunto del proyecto de la NASA, Ashwin Vasavada.
Vasavada dice que encontrar materia orgánica es una posibilidad remota, pero Curiosity está yendo al lugar que los científicos creen que les da la mejor oportunidad de encontrarlo. Se llama Cráter Gale. Los científicos piensan que si el agua alguna vez fluyó en Marte, podría haberse acumulado en este cráter. Y donde hay agua, podría haber vida.
¿Cómo va la búsqueda de vida?
Dado que la NASA se ha embarcado en esta increíble misión de alto riesgo y alta recompensa, resulta interesante echar un vistazo a cómo va la ‘búsqueda de vida’.
Decidimos observar todos los planetas que han sido descubiertos por el equipo del telescopio Kepler. Y luego está el telescopio Webb, con su promesa y sus problemas. Está retrasado en años y en miles de millones de dólares en presupuesto, pero podría revolucionar nuestra comprensión del universo. Y luego pensamos, ya sabes, estamos haciendo todas estas cosas para encontrar vida, ¿pero qué pasa con proteger de los asteroides la vida que ya tenemos aquí?
Al hablar con los científicos, se hizo cada vez más claro que la mayoría de ellos están convencidos de que hay vida ahí fuera. Seth Shostak, astrónomo del SETI (Instituto de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre, por sus siglas en inglés), dice que los planetas son “como gatitos”: No silo obtienes uno en la camada.
“La conclusión es que hay alrededor de cientos de miles de trillones de planetas solo en la parte del universo que podemos ver. Ése es un número muy grande. También es difícil imaginar que todos son estériles”, dijo Shostak.
La gente de Kepler fue un poco más cauta, diciendo que tienen sus opiniones, pero su atención se enfoca en la búsqueda de planetas de tamaño similar a la Tierra y a la distancia justa de su sol para posiblemente sustentar la vida. Los científicos se refieren a esto como la ‘zona Ricitos de Oro’.
“Kepler es sólo el primer paso”, dijo el investigador principal Bill Borucki. Kepler indica “los planetas del tamaño de la Tierra. Éste es el número de ellos. Y este es el número de ellos que está en la zona habitable”.
El equipo científico de Kepler está haciendo nuevos descubrimientos de planetas candidatos al parecer todos los días. Les llaman candidatos hasta que sean verificados. Han encontrado más de 1,200, incluyendo unos 50 en esa zona habitable.
“A partir de nuestras consolas, desde nuestras computadoras, estamos explorando el universo. Estamos, literalmente, encontrando nuevos mundos al igual que los navegantes europeos hicieron cuando cruzaron el Atlántico hace 500 años”, dijo la científica del proyecto Natalie Batalha.
Incluso los planetas que están encontrando que son distintos a la Tierra son extraños. Hay uno que tiene al menos el doble de tamaño que Júpiter y otro que tiene la densidad de la espuma de poliestireno. “Nadie esperaba eso”, dijo Borucki.
La conclusión es, como el astrofísico Jonathan McDowell dijo: “Estamos pasando por este periodo increíble donde las diferentes herramientas nuevas que estamos trayendo, tanto a telescopios basados en Tierra como a telescopios espaciales, simplemente nos dan estas revelaciones impresionantes sobre lo que está pasando”.
Así que todo se reduce a esto: Aunque puede haber vida ahí fuera, la realidad es que el universo es un lugar tan grande que no vamos a visitar a nuestros vecinos espaciales en el corto plazo. Considéralo de esta manera: Kepler está hallando planetas en nuestra galaxia Vía Láctea, nuestro propio patio trasero. Pero todavía están muy lejos; podrían pasar 50 o quizás 100 años antes de que tengamos telescopios lo suficientemente capaces de ver exactamente cómo lucen.
En cuanto a la vida allá afuera, aunque nunca la encontráramos, el universo es tan grande que ¿realmente podremos decir que sabemos a ciencia cierta que estamos solos?