Manifestantes contra el gobierno yemení marchan en Saná exigiendo el juicio de Ali Abdullah Saleh.

Por Hakim Almasmari, para CNN

(CNN) – Al menos 24 personas murieron el domingo tras un ataque de militantes chiíes houthis a un poblado sunita en el norte de Yemen, dijeron médicos y testigos. Asimismo 61 suníes resultaron heridos cuando sus casas fueron atacadas con granadas.

Los testigos aseguraron que los heridos no recibieron atención médica debido a que el pueblo está sitiado. Los ataques se concentraron en un centro religioso suní. Todos los esfuerzos de mediación para acabar el conflicto han fracasado.

Los houthis, un movimiento chiíta en Yemen, se han expandido durante los últimos 10 meses en su lucha para derrocar al presidente.

La oposición ha expresado su preocupación por el aumento de presencia houthi. “No podemos consentir ningún acuerdo político con un movimiento armado. ¿Cómo podemos involucrarlos en la política si no creen en ella?”, dijo Ali Mamari, un miembro de la oposición en Yemen.

Mamari dijo que los yemenís no aceptarán movimientos que se expandan con violencia y asesinado personas. “No hay diferencia entre los houthis y Al Qaeda, ambos están armados y usan la fuerza para expandir sus creencias”, dijo.

Los houthis rechazaron el acuerdo de transferencia de poder que se llevó a cabo en Riad a principio de la semana y dijeron que no lo reconocerían.

“El movimiento tiene más de 100,000 combatientes listos para obedecer las órdenes de su líder espiritual, Abdul Malik al-Houthi”, dijo Ahmed Bahri, un experto en asuntos houthis. “El movimiento está bien organizado y solo tiene una cabeza”, dijo Bahri.

La violencia sectaria está en su máxima expresión en el norte de Yemen, en donde el control de los houthis está presente en cinco provincias.

Arabia Saudita combatió a los houthis en 2009 pero no pudo frenar su expansión.

Los ataques en el norte de Yemen se presentan un día después de que el vicepresidente pidiera que las elecciones presidenciales se celebren en febrero, según reportaron medios locales.

El presidente Ali Abdullah Saleh renunció después de meses de protestas contra su mandato de 33 años. Saleh se convirtió en el cuarto líder en abandonar su cargo como resultado de los disturbios de la Primavera Árabe que han ocurrido en gran parte de Medio Oriente y el norte de África este año.

Saleh regresó a Yemen en la noche del sábado, días después de que firmara un acuerdo en Arabia Saudita cediendo sus poderes, según informó la agencia estatal de noticias de Yemen.