(CNN) — En la última semana, Jeremy Lin pasó de ser un basquetbolista profesional desconocido que luchaba por obtener tiempo en la cancha, a ser una sensación deportiva y mediática. CNN presenta una mirada más detallada del primer jugador estadounidense de origen taiwanés que juega en la NBA, y cómo se convirtió en un basquetbolista más popular con cada partido.
¿Quién es Jeremy Lin?
Sus padres son Shirley y Gie-Ming, nació el 23 de agosto de 1988. Lin es el basquetbolista asiáticoamericano que juega para los Knicks de Nueva York de la NBA. Viste la camiseta con el número 17 y juega como base. Para ser un basquetbolista profesional no es demasiado alto, mide 1.91 metros y pesa 90.7 kilogramos. Jugó durante cuatro años en Harvard y apenas tiene un año como jugador profesional.
Hechos destacados en su carrera
Después de su paso por Harvard (en donde fue seleccionado dos veces para la all Ivy-League, la conferencia de las ocho instituciones educativas privadas de excelencia), Lin no fue seleccionado por ningún equipo de la NBA durante el draft, y en lugar de eso firmó como agente libre con los Warriors de Golden State en julio de 2010. En diciembre de 2011, firmó con los Knicks de Nueva York después de que los Rockets de Houston lo cortaron. Los 109 puntos que anotó la semana pasada en sus primeros cuatro partidos como titular superaron el récord de Allen Iverson para convertirse en la mayor cantidad de puntos anotada por cualquier jugador desde la fusión de la NBA con la ABA en 1976.
‘Linsanity’ (La locura por Lin): ¿A qué se debe la publicidad?
A todo el mundo le encanta una historia en donde se lucha contra todas las probabilidades, y Lin encaja perfectamente ahí. Las razones de su meteórico ascenso para convertirse en la sensación del basquetbol estadounidense son numerosas, pero todo empieza con su talento. Tan solo transcurrieron unas semanas de que pasó de ser un jugador suplente a ser el salvador del equipo, liderando a los Knicks a cinco victorias consecutivas, con un promedio de 20 puntos por partido, mientras el porcentaje de sus tiros de campo durante su racha ganadora es superior al 50%. En el partido del 10 de febrero contra los Lakers de Los Ángeles de Kobe Bryant, logró anotar 38 puntos tan solo en esa victoria.
Lin también destaca debido a su capacidad académica, actualmente es el único jugador en la NBA que cuenta con un título de Harvard, y es el primer graduado de esa universidad que juega en la liga en casi 60 años.
También está el factor de la raza: Lin es el primer basquetbolista estadounidense de origen chino o taiwanés que juega en la NBA, lo que lo ayuda a entrar al importante mercado de asiáticosamericanos aficionados al basquetbol. Y a su vez esto se extiende en general a todos los aficionados de la NBA.
“Es sorprendente, ¿cómo no estar emocionado?”, preguntó un cliente mientras veía en la televisión de un bar de Minneapolis jugar a Lin. “Digo, ve a los Knicks, ¿los has seguido durante los últimos 10 años? Y entonces llega este tipo y sabe cómo jugar el deporte, tienes que emocionarte”.
Su raza también tiene un efecto internacional, aunque Lin no ha llegado a tener el mismo estatus de celebridad en las ligas chinas como la del pívot retirado Yao Ming, el interés de los chinos ya empezó, tiene asegurados a 900,000 seguidores en Weibo, la respuesta de China a Twitter. La NBA también dijo que socios de las televisoras en Asia pronto empezarán a transmitir los partidos de los Knicks.
Por encima de su capacidad atlética y académica, Lin también atrae a aficionados por su devoción pública al cristianismo, y estas personas piensan en el papel que tiene el jugador como modelo a seguir para sus hijos.
Lin dijo que fue criado en la fe de la Iglesia y se convirtió en cristiano en preparatoria. El viernes, después de derrotar a los Lakers, dijo, “Le doy mis alabanzas a Dios”. También dijo en una entrevista en 2010, que quería ser pastor cuando se retire de la NBA.
Un sueño para la comercialización
Desde el punto de vista de la mercadotecnia de los Knicks, la popularidad de Lin comprobó ser de gran ayuda, la semana pasada la camiseta con el número 17 superó en ventas a la de Lebron James y a la de Kobe Bryant.
Y con el daño de relaciones públicas del reciente cierre de la NBA y el declive constante de los antiguos equipos superpoderosos de los Lakers de los Ángeles y los Celtics de Boston, la liga busca nuevas personalidades para atraer a más aficionados al deporte. Con su atractivo multicultural, sus antecedentes en una universidad de la Ivy League (de excelencia) y una historia de que surgió de la nada, Lin cumple con todos los elementos con creces.