El estadounidense Brian Willingham y el inmigrante mexicano Alfonso García se casaron legalmente en Nueva York.

LOS ÁNGELES (CNN) — Un matrimonio formado por un ciudadano estadounidense y un inmigrante de ascendencia mexicana sostienen una lucha contra las leyes federales de Estados Unidos para frenar la deportación del extranjero.

Alfonso García, de 35 años, llegó a Estados Unidos con sus padres cuando aún era un niño. Él y su esposo, Brian Willingham, de 37 años, solicitan al servicio federal de inmigración una residencia legal basada en su matrimonio, afirmó el abogado de la pareja Lavi Soloway.

En el último giro del caso, una corte federal de inmigración en San Francisco detuvo el viernes un procedimiento de deportación contra García, aseguró el abogado.

La decisión del juez busca posponer la deportación mientras avanza el proceso de García para obtener su residencia legal, afirmó Soloway. La próxima audiencia del caso fue programada por la corte de inmigración para el 27 de octubre, afirmó el abogado.

La pareja se casó legalmente en Nueva York y está registrada bajo el régimen de compañeros domésticos en California, con domicilio en el área de San Francisco Bay. Sin embargo, la corte federal de inmigración no reconoce el matrimonio homosexual bajo el Acta de Defensa del Matrimonio, que define al matrimonio como algo entre parejas de sexos opuestos, detalló Soloway.

La ley federal es actualmente discutida en terrenos constitucionales, y se espera que alcance alguna resolución este verano en la corte federal de apelaciones. Sin embargo, el caso no ha alcanzado la Corte Suprema del país.

La pareja espera que la ley federal sobre matrimonio sea anulada antes de la audiencia de octubre, aseguró Soloway. “Si fueran una pareja de sexos opuestos, no tendríamos esta discusión ahora”, dijo Soloway sobre los esfuerzos de García por asegurar una residencia legal en Estados Unidos como un hombre casado con un ciudadano estadounidense.

“De lo que se trata este caso es de un mexicano que fue traído a Estados Unidos cuando era niño y ha vivido aquí durante 20 años, y tiene a toda su familia”, dijo Soloway. “Pero no tiene un estatus legal”, agregó.

“Tenemos toda una campaña sobre este caso y otros como él”, afirmó Soloway, en referencia a la campaña Alto a las deportaciones, a través de cuyo sitio varias parejas homosexuales binacionales están luchando contra la deportación, la separación y el exilio causados por la ley de inmigración y el Acta de Defensa del Matrimonio de Estados Unidos.

El estatus indocumentado fue identificado por las autoridades durante una inspección vial de rutina en julio pasado, la cual llevó a una revisión de los antecedentes legales de García, según la pareja. Los padres de García son residentes legales que buscan la residencia legal en el país, detalló el abogado.

García y Willingham se conocieron en octubre de 2001. “Como un ciudadano estadounidense gay, el gobierno federal no me ofrece nada, cero, acceso nulo a los derechos federales que tienen muchas parejas casadas”, afirmó Willingham en la página en internet de la pareja.

“Esto no es un asunto de separados, pero iguales. No hay derechos federales separados para gays casados. No hay derechos en lo absoluto (…) Esto es el gobierno federal expulsándons”, dijo Willingham.

El presidente Barack Obama ha pedido una revisión legislativa del Acta de Defensa de Matrimonio, y mientras los demócratas en el Comité Judicial del Senado votaron el año pasado para reenviar la revisión al pleno del Senado, se considera que la medida no tiene oportunidades de pasar por la Cámara de Representantes, liderada por los republicanos.

Si García es deportado, tendrá prohibido regresar a Estados Unidos en 10 años, informó su abogado. “He pasado la mayor parte de mi vida en Estados Unidos. Este país es mi hogar y Brian es mi esposo. No quiero perder todo lo que hemos construido juntos y que me digan que no puedo regresar a Estados Unidos por 10 años. Solo quiero saber que podemos estar juntos. Solo quiero saber que el juramente solemne que nos hicimos el uno al otro contará ante los ojos de la ley”, afirmó García a través de un comunicado.