Además del mensaje,  Reshonda prohibió temporalmente a su hija de participar en Instagram.

(CNN) - Cuando Reshonda Tate Billingsley dejó a su hija abrir una cuenta en Instagram, la novelista radicada en Houston dejó claro lo qué la menor debía publicar en ese servicio de Internet donde se comparten fotografías.

Por ello, la madre no estaba muy impresionada cuando vio que su hija de 12 años en una foto junto a una botella de alcohol abierta del bar de su padre junto a un texto que decía: “desearía poder tomar este vodka”.

Billingsley decidió corregir el error online en la propia plataforma en Internet e hizo que su hija subiera una foto en la que sostenía un cartel detallando la falta cometida.

“Ya que quiero subir fotos sosteniendo una botella de licor, obviamente no estoy lista para las redes sociales, así que tomaré un descanso hasta que aprenda qué debo y qué no debo postear. Adiós”, dice el mensaje escrito.

Reshonda prohibió además temporalmente a su hija participar en Instagram, con la esperanza además de persuadir a otros padres de monitorear las actividades de sus hijos en la red.

El original castigo público ha despertado la controversia en Estados Unidos con muchas personas cuestionando el proceder de la madre, mientras que otras aprueban la reacción de la madre.