(CNN) — La Eurocopa es el segundo torneo en tamaño y prestigio después del Mundial de Fútbol, y es igualmente rica en historias. Pero ahora, una línea argumental parece abrumar a todos los demás.
La historia de hoy no es si el portugués Cristiano Ronaldo puede agitar su reputación como el James Lebron de Europa, un hombre que entusiasma a los aficionados durante toda la temporada sólo para ahogarse en los partidos importantes. Tampoco es la historia acerca de si el campeón defensor España puede defender el título sin dos de sus grandes estrellas. No se trata tampoco de cómo Franck Ribery y el equipo francés pueden recuperarse de una embarazosa campaña en la Copa del Mundo 2010.
No, la historia de hoy es sobre el racismo, sobre todo en los estadios de Polonia y Ucrania, que organizan conjuntamente la Eurocopa de 2012 que inicia este viernes. Mientras una reciente investigación de la BBC mostró varios ejemplos de la intolerancia y el racismo en los partidos de liga allí -algunos de ellos violentos- las autoridades polacas y ucranianas insisten en que la imagen de sus países ha sido tergiversada.
Sin embargo, los hechos demuestran otra cosa. La selección nacional de futbol holandés fue sometida a insultos racistas durante una sesión de entrenamiento el miércoles pasado en la ciudad polaca de Cracovia, dos días antes de iniciar el torneo.
Cientos de personas supuestamente se dirigieron a los miembros negros de la escuadra con “cantos de mono” durante una sesión de entrenamiento en el Miejski Stadion, el hogar del equipo local Wisla de Cracovia.
“Es una desgracia real, especialmente después de volver de Auschwitz (la selección holandesa había visitado el campo de concentración el mismo miércoles) que se enfrenten a esto”, dijo Mark Van Bommel, el capitán holandés, en una conferencia de prensa la noche de este jueves.
“Vamos a platicarlo con la UEFA y si ocurre en un partido hablaremos con el árbitro para pedirle que nos lleve fuera de la cancha”.
Cuando se le comentó que los periodistas holandeses afirmaron no haber escuchado nada, Van Bommel dijo: “Hay que abrir los oídos. Si usted lo escuchó y no quieres aceptarlo, es aún peor”, de acuerdo con la cadena deportiva ESPN.
El inicio de la máxima competición de futbol europeo, que comienza en Varsovia este viernes, se ha visto afectado por una serie de informes que destacan los incidentes de violencia racial en las naciones de Europa del Este.
Las familias de dos de los jugadores negros de Inglaterra, Alex-Oxlade Chamberlain y Theo Walcott del Arsenal, decidieron no viajar a Ucrania y Polonia, mientras que en Italia, Mario Balotelli, jugador del Manchester City, dijo que va a salir del campo si recibe insultos racistas.
El equipo inglés tiene previsto recibir alrededor de 3,500 aficionados en el mismo estadio en Cracovia este viernes para una sesión de entrenamiento.
Michel Platini, presidente de la UEFA, dijo que los jugadores no deben tomar el asunto en sus propias manos, y que cualquier jugador que salga de la cancha será amonestado.
“Es el trabajo de un árbitro suspender el partido y él lo hará si hay algún problema de este tipo. Cuento con los aficionados de Europa Occidental y Oriental para participar en una fiesta de gran futbol. Si yo estoy aquí como un presidente de la UEFA y todos ustedes están aquí es porque queremos que esto sea una fiesta del futbol, no un problema “, dijo a periodistas este jueves.
Un reciente documental de la BBC mostró a gente de ultraderecha de Polonia y Ucrania, que muestran actitudes racistas y antisemitas. El documental Panorama emitió imágenes filmadas en partidos en ambos países, en los que mostraba a los fanáticos emitiendo el saludo nazi en las gradas y dirigiendo cantos de monos a los jugadores negros. Esto hizo que el exfutbolista inglés Sol Campbell advirtiera a los aficionados que no viajen a cualquiera de estos dos países.
Sin embargo, funcionarios de los países anfitriones arremetieron contra el programa. Marcin Bosacki, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia, dijo a CNN que era “periodismo barato”, mientras que Volodymyr Khandogiy, embajador de Ucrania en Gran Bretaña, dijo que estaba “desequilibrado y parcializado el informe sobre la situación en Ucrania”.
Sin embargo, Piara Power, director ejecutivo de la organización europea Futbol Contra el Racismo, dijo que aún hay mucho trabajo por hacer en ambos países.
“Creo que sabemos la situación en el futbol nacional, tanto en Polonia y Ucrania, y me temo que el documental ha puesto el dedo en la cabeza, es una situación muy mala”, dijo.
“Sin embargo, hay un buen trabajo para asegurarse que las imágenes en los estadios de la Eurocopa 2012 no se parecerán a lo que vimos en el documental”.