El gobierno del presidente Thein Sein puso en libertad a cientos de presos políticos el año pasado.

Bangkok, Tailandia (CNN) — La liberación de prisioneros dada a conocer el martes por las autoridades de Myanmar incluye a por lo menos 24 presos políticos, dijo un grupo en pro de los derechos de los presos.

El gobierno planeó liberar a un total de 46 presos con el fin de “ayudar a la reconciliación nacional”, informó el periódico estatal Nueva Luz de Myanmar. El gobierno no distingue entre presos políticos y no políticos.

Sin embargo, Bo Kyi, secretario adjunto de la Asociación de Asistencia a Presos Políticos (AAPP), dijo que su organización había logrado hasta ahora localizar a un total de 24 presos políticos liberados. “La liberación está confirmada, y ha comenzado”, dijo.

La AAPP es una organización sin fines de lucro que recolecta información sobre presos políticos y sus condiciones en Myanmar, y también brinda asistencia a los presos y a sus familias. Calcula que siguen detenidas en Myanmar alrededor de 400 personas por razones políticas.

El gobierno del presidente Thein puso en libertad a cientos de presos políticos el año pasado, como parte de una serie de reformas políticas después de décadas de gobiernos militares represivos. Los gobiernos occidentales han respondido a estas medidas con la disminución de sanciones al país.

Las autoridades también han participado en las conversaciones de paz con los grupos étnicos rebeldes y permitió que el partido de oposición de la defensora de la democracia Aung San Suu Kyi participara en abril en las elecciones parciales para el Parlamento nacional.

El partido de Suu Kyi, la Liga Nacional para la Democracia (LND), ganó casi todos los escaños en disputa en dichas elecciones. Ella y otros recién elegidos integrantes de la LND han tomado posesión de sus curules en el parlamento.

Suu Kyi, quien pasó varios años bajo arresto domiciliario en Myanmar, el mes pasado realizó su primera visita a Europa en 24 años, y por fin dio el discurso de aceptación del Premio Nobel de la Paz que le fue otorgado en 1991, y habló en el Parlamento británico.

A pesar de los recientes avances en Myanmar, sigue la inquietud acerca de si la institución militar, la cual mantiene un control abrumador del Parlamento, está comprometida con un cambio político profundo y duradero.

En un ejemplo reciente de las distintas actitudes hacia la libertad de expresión, la comisión electoral del país publicó la semana pasada un comunicado en el periódico Nueva Luz diciéndole a Suu Kyi y a la LND que dejen de referirse al país con el nombre de Birmania.

El nombre de Birmania se deriva del grupo étnico mayoritario del país, el birmano. Fue empleado de manera oficial durante y después de la dominación colonial británica, hasta que la junta militar cambió el nombre del país a Myanmar, en 1989. Al igual que Suu Kyi, muchos ciudadanos todavía se hablan del país como Birmania, al igual que los gobiernos de Gran Bretaña y EU.

Al hacer referencia del empleo de la palabra de Myanmar en la constitución del país, la comisión electoral dijo que “nadie tiene el derecho” de llamarlo Birmania.

Suu Kyi señaló que no había ninguna cláusula o sección en la Constitución que prohíba a la gente el decir Birmania.

Jethro Mullen, de CNN, contribuyó a este reporte.