(CNN) — El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, recibió asilo político del gobierno de Ecuador y permanece en le embajada ecuatoriana en Londres tratando de evitar su extradición de Gran Bretaña a Suecia, donde enfrentaría acusaciones por delitos sexuales.
La estrategia de Assange parece descabellada, pero no es la primera persona en buscar una ruta de escape a través de una misión diplomática. Aquí hay algunos precedentes.
Chen Guangcheng. Embajada de Estados Unidos en Beijing, 2012
El abogado autodidacta y activista escapó de su arresto domiciliario una noche de abril y huyó a la embajada estadounidense, donde pasó seis días antes de salir para recibir tratamiento médico. Chen más tarde salió de China con su familia tras recibir una beca en la Universidad de Nueva York.
Jozsef Mindszenty. Embajada de Hungría, 1956-1971
El cardenal católico húngaro anticomunista vivió en la embajada estadounidense en Budapest por 15 años después de la invasión soviética a su país. Finalmente acordó ir al exilio y murió en Austria en 1975.
Svetlana Alliluyeva. Embajada de Estados Unidos en Nueva Delhi, India, 1967
La única hija del dictador soviético Joseef Stalin recibió autorización para llevar a India las cenizas del hombre de quien vivió enamorada, pero desertó al dirigirse hacia la embajada estadounidense en Nueva Delhi y quemar su pasaporte. Vivió en Estados Unidos como Lana Peters hasta su muerte, en noviembre pasado.
Manuel Noriega. Embajada del Vaticano en Ciudad de Panamá, 1989
Las fuerzas estadounidenses invadieron Panamá para derrocar y arrestar a Noriega, obligando al dictador a buscar refugio en la misión diplomática de la Santa Sede. Las tropas estadounidenses instalaron grandes bocinas alrededor del lugar, reproduciendo música a todas horas, una táctica psicológica para estremecer al general. Noriega se rindió después de 10 días y fue llevado a Estados Unidos para ser juzgado. Fue hallado culpable de tráfico de drogas y otros crímenes.
Wang Lijun. Consulado estadounidense en Chengdu, China, 2012
Uno de los jefes de policía de China más reconocidos buscó refugio en el consulado estadounidense en medio del misterio por la muerte del empresario británico Neil Heywood, un amigo de la familia del jefe de Wang, una de las máximas figuras del Partido Comunista, Bo Xilai. El caso fue reabierto después de la intervención de Wang, que parece haber implicado a Bo, pero Wang fue tomado bajo custodia china cuando dejó la misión diplomática y no ha sido visto desde entonces.