(CNN) — El gobierno de Venezuela informó que investiga denuncias de que mineros brasileños mataron a docenas de indígenas yanomami durante un ataque en la Amazonia venezolana.
El anuncio de este miércoles ocurre después de que una organización yanomami y otros grupos indígenas llamaran a tomar medidas al respecto.
Dos funcionarios públicos llevarán a cabo la investigación sobre el supuesto ataque desde un helicóptero, informó el gobierno venezolano.
Survival International, una organización con sede en Londres que aboga por los derechos de los indígenas a nivel internacional, publicó en internet una declaración de un grupo de representantes indígenas y comunidades se la selva amazónica.
En el documento, las organizaciones señalaron que el número de muertos aún no está claro, pero que de aproximadamente 80 yanomamis que vivían en la comunidad, solo encontraron a tres sobrevivientes.
Se cree que el supuesto ataque contra la comunidad de Irotatheri, en la municipalidad de Alto Orinoco, en Venezuela, cerca de la frontera con Brasil, ocurrió en julio. Los sobrevivientes dijeron en su propio reporte que la información apenas surge porque la comunidad es remota.
Lo yanomami, quienes viven en Venezuela y Brasil, son considerados el mayor grupo indígena del continente que permanece sin contacto con el resto del mundo.
Los antropólogos han descrito la tribu de varias formas, desde belicistas feroces a místicos o intelectuales introspectivos.
En años recientes, la tribu ha estado bajo una fuerte presión por parte de minas ilegales que han llegado a sus tierras en busca de beneficios.
Los mineros brasileños han transmitido enfermedades como malaria y gripe a los yanomami, quienes tienen una escasa resistencia a los virus, según observadores.
El lugar donde supuestamente ocurrió el ataque está a cinco horas en helicóptero o 15 días a pie desde Puerto Ayacucho, la mayor ciudad venezolana en la Amazonia, según el gobierno.
El daño causado a los indígenas y el medio ambiente por parte de los trabajadores de las minas de oro en la zona fronteriza es un problema de larga data. El mes pasado, la policía brasileña llevó a cabo una operación en contra de operadores de minas en el lado brasileño de la frontera.
En su reporte de la situación, Survival citó a indígenas yanomamis quienes hablaron con otros indígenas que habían visto cuerpos quemados y huesos en la zona donde supuestamente ocurrió el ataque.
Una de las personas citadas es Luis Shatiwa Yanomami, un líder de la organización Horonami. Él relató que le dijeron que quienes sobrevivieron estaban cazando cuando la comunidad fue incendiada.
“Por tres años hemos estado denunciando la situación”, señaló Survival. “Hay muchos mineros de oro trabajando de forma ilegal en la selva”.
Tanto Survival como las organizaciones indígenas hicieron referencia a un ataque ocurrido en 1993 en la comunidad yanomami de Haximu, en Brasil, en el cual fueron asesinados 16 indígenas. Varios mineros fueron sentenciados por su participación en el ataque, de acuerdo con Survival.
Las organizaciones pidieron llevar a cabo una investigación criminal contra el supuesto ataque de julio y a tomar medidas drásticas contra las actividades ilegales en el área.
“Es otra espantosa tragedia para los yanomami, que acumulan crimen sobre crimen”, dijo Stephen Corry, director de Survival. “Todos los gobiernos amazónicos deben detener la minería ilegal rampante que liquida los territorios indígenas”.