A diferencia de 'Irene', el huracán 'Sandy' atravesará el corazón de la zona de refinadoras del noreste estadounidense.

(CNN) — Los precios de los combustibles en el noreste de Estados Unidos podrían aumentar los días posteriores al paso del huracán Sandy, debido a que el meteoro afectará el corazón de la zona de refinamiento de petróleo en esa parte del país.

Sin embargo, si la suspensión de actividades no es mayor, los precios deberían volver a la normalidad poco tiempo después, según información de CNNMoney.

Se prevé que los fuertes vientos y las intensas lluvias de la tormenta más intensa jamás registrada en esa región del Atlántico afecten las principales refinerías de Delaware, Nueva Jersey y Pennsylvania. Varias de ellas han sido temporalmente cerradas.

Entre ellas se encuentra la más grande refinadora de la zona, que es administrada por la empresa Philadelphia Energy Solutions, y tiene una capacidad de procesamiento de 330,000 barriles de crudo al día.

El daño se ve aminorado ante una disminución en la capacidad productiva de la zona. De los 1.6 millones de barriles refinados en 2007, las refinerías del noreste ahora procesan solo un millón, debido a que el refinamiento de crudo delgado fue sustituida por el de un petróleo más pesado que cuesta más refinar.

Ante esto, el mayor impacto a la producción ocurriría si los escombros arrastrados por el huracán o los cortes de energía eléctrica obligan a la suspensión de las refinerías por varios días.

Sin embargo, quedan dudas sobre el efecto del meteoro en la región refinadora debido a que esta es la primera prueba en la región desde la caída de la capacidad productiva. A diferencia de Irene, que en 2011 permaneció al margen este de la región refinadora, se espera que Sandy atraviese por el corazón de la zona.

Sandy continúa su avance hacia Nueva Jersey con vientos sostenidos de 150 kilómetros por hora, a una velocidad de 44 kilómetros por hora, según un reporte emitido al medio día de este lunes por el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).

Los meteorólogos ubican al meteoro unos 180 kilómetros al sureste de Atlantic City, Nueva Jersey, y 285 kilómetros al sureste de Nueva York.

A medida que avanza hacia territorio continental estadounidense, Sandy podría mezclarse con un frente frío y convertirse en una supertormenta, lo que la convertiría en la más grande registrada en la región en tiempos recientes.