(CNN) – Es el fin del mundo como lo conocemos.
Y sin embargo el mundo parece estar perfectamente.
Se suponía que el viernes sería el día en que la Tierra dejaría de existir. El pronosticado apocalipsis –que dio pie a la película 2012, a un programa de televisión de National Geographic llamado “Doomsday Preppers”, que mostraba a las personas que tomaron medidas extraordinarias para el fin del mundo, y numerosos chistes en redes sociales- se originó por el final de una fase importante del calendario maya.
La civilización maya, que se remonta desde el año 2.000 a.c. y todavía está activa –aunque sus pobladores e influencia se han diezmado en los últimos cientos de años- mide el tiempo en ciclos llamados “baktuns” de 394 años cada uno. El solsticio de invierno que ocurrió el viernes marca el final del baktun 13.
“¡Va a pasar”, escribió un usuario de CNN.com. “Todos los historiadores mayas están de acuerdo, ¡los mayas predijeron que el fin del mundo sería el mismo año en que dejaran de existir los Twinkies! ¿CÓMO LO SABÍAN?”.
Algunos se tomaron de forma mucho más seria el día del fin. Ryan Croft de Asheville, Carolina del Norte, por ejemplo, dijo que le estaba enseñando a su familia cómo subsistir con fuentes alternativas de nutrición como algas, ratón asado y gusanos, así como a hacer un rifle artesanal –un híbrido entre un AR-15 y una AK-47- para luchar contra las señales del juicio final.
“Pensé en el colapso económico y cómo se ve en realidad”, le dijo Croft a WHNS, afiliada de CNN, señalando que él no estaba esperando la destrucción total del mundo sino un camino más gradual hacia el caos. “Las personas quieren actuar como que si no pudiera ocurrir o no fuera a ocurrir, y ya ocurre alrededor del mundo. Hay lugares así en este momento”.
Pero ni siquiera los mayas de la actualidad se creyeron el cuento del apocalipsis. Ven el calendario como presagiando el final de una era y anunciando el inicio de una nueva, no como la muerte de todas las especies de la Tierra.
“Es una era. Somos afortunados de ver cómo termina”, dijo el tallador de madera Santos Esteban en Yaxuná, México, un pueblo tranquilo de menos de 700 indígenas mayas.
Tal cual como la predicción no fatalista de Esteban, el viernes llegó y pasó por incontables lugares del mundo –desde Sídney a Estocolmo, desde Katmandú a Ciudad del Cabo- sin ninguna calamidad épica.
Eso no significa que el Día del Juicio Final no vaya a ocurrir, y posiblemente pronto. Algunos que estudian el calendario maya dicen que la fecha del fin del periodo no es el viernes, sino el domingo. Y muchos grupos, a través de los años y alrededor del mundo, han profetizado el fin del mundo en días específicos.
Todos se han equivocado, hasta ahora.
Greg Botelho, Nick Parker y Ben Brumfield contribuyeron a este informe.