(CNNEspañol.com) –Según un reciente estudio del Centro de Investigación Aplicada, en los últimos dos años, miles de padres de niños ciudadanos estadounidenses fueron deportados.

Pero ¿qué pasa con sus hijos? Muchos de ellos terminan languideciendo en hogares de acogida temporales, separados, posiblemente para siempre, de sus padres y atrapados en un sistema donde muchas veces no reciben el cuidado apropiado.

Esa es la historia de Edgar Carranza, un joven que a los 13 años tuvo que enfrentar etapas cruciales de su vida sin el apoyo de una familia y su historia es testimonio del verdadero impacto de las deportaciones y la falta de una reforma migratoria. María Santana cuenta su historia en el video.