(HLN) – Es bastante típico en la ronda de agradecimientos de los premios Oscar mencionar a los padres, los compañeros de trabajo, algún tipo de causa pertinente y, para mucha gente, un poder superior. “Me gustaría dar las gracias a Dios y a la Academia…”, ya sabes cómo es.
Excepto que, este año, el vecino de arriba no tuvo ni una sola mención de los principales ganadores de los Oscars. La referencia más cercana que tuvimos fue la del director Ang Lee al referirse al “dios de las películas”. No a Yahvé, Alá, Buda o Krishna.
Es algo extraño pensar en esto: en una noche en la que tantas estrellas ganan tantas cosas y dan gracias a tanta gente, son sorprendentemente escasas las referencias religiosas, no sólo este año, sino en toda la historia de los Oscar.
De acuerdo con el proyecto “Gracias a la Academia”, que realiza un seguimiento de las tendencias de los Oscar, un porcentaje muy pequeño de los ganadores en las cinco categorías (Protagonista / Actor de Reparto, Protagonista / Actriz de Reparto, y Director) alguna vez hace referencia religiosa de algún tipo (15-30% en promedio). De hecho, sólo dos referencias religiosas fueron registradas antes de 1980. Y es más típico de las damas: en los últimos años, los únicos ganadores que hicieron una referencia religiosa en su discurso de aceptación fueron Meryl Streep, Octavia Spencer, Natalie Portman, Melissa Leo y Tom Hooper.
Entonces, ¿qué podemos deducir de esta tendencia? Probablemente nada, aparte del hecho de que se puede suponer mucho sobre la gente a quien se agradece y por qué. Después de todo, el mejor actor, Daniel Day Lewis agradeció a “la mente misteriosamente hermosa, al cuerpo y al espíritu de Abraham Lincoln”. Y ese agradecimiento tampoco lo vimos venir…