(CNNMéxico) — Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazaron participar en el narcotráfico del país asegurando que forman parte de una “organización de alzados en armas”, dio a conocer uno de sus voceros Rodrigo Granda, alias Ricardo Téllez.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazaron este domingo participar en actividades relacionadas con el narcotráfico en el país, con el argumento de que son una organización seria y responsable de “alzados en armas”, informó el vocero, Rodrigo Granda, conocido como Ricardo Téllez.
“Somos una organización político militar demasiado seria, demasiado responsable, es sabido que la droga la pueden encontrar en el buque insignia Gloria (que pertenece a las Fuerzas Armadas del país), a veces en los aviones presidenciales, eso ha sido notorio”, declaró el portavoz de los insurgentes a periodistas este domingo, de acuerdo con la agencia EFE.
Un alto mando de las Fuerzas Armadas de Colombia afirmó este sábado que elementos del Ejército destruyeron el centro de acopio más grande de droga de las FARC, el cual estaba ubicado en el departamento de Cauca y que contaba con el material necesario para elaborar hasta una tonelada de cocaína por día.
Dentro del complejo, el Ejército encontró cuatro toneladas de droga, afirmó el coronel Jorge Mora, comandante de la Brigada Especial contra el Narcotráfico. “Este hallazgo es considerado como uno de los más duros golpes a las finanzas de las FARC, puesto que toda la incautación pertenecía a la estructura criminal”, aseguró.
El hallazgo se registró mientras el gobierno colombiano y las FARC se encuentran en un proceso de diálogos de paz en La Habana que por momentos se ha estancado; ambos bandos intercambiaron acusaciones en febrero sobre la disponibilidad para avanzar en una solución pacífica al conflicto que se ha prolongado por cinco décadas.
El portavoz de los insurgentes afirmó que en los diálogos de paz “se ha avanzado bastante” en el centro de convenciones de La Habana, donde la discusión se reanudó este domingo. Al lugar llegó el ex vicepresidente y jefe del equipo negociador del gobierno de Colombia, Humberto de la Calle, informó EFE.
La mesa de diálogos entre el gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC desarrolla su séptimo ciclo centrado aún en la cuestión de la tierra, el primer tema de la agenda de la negociación y también el más complejo al estar en la génesis del conflicto armado que padece Colombia hace casi medio siglo.
Luego de un cese unilateral al fuego que finalizó el 20 de enero, la dirección de las FARC anunció que reiniciarían su estrategia de captura de “prisioneros de guerra” a la que se refirieron como un “fenómeno que se da en cualquier conflicto que haya en el mundo”, en este caso con el gobierno colombiano.
Las FARC entregaron a mediados de febrero a los policías colombianos Cristian Camilo Yate y Víctor González a una misión humanitaria, según informó el Comité Internacional de la Cruz Roja.
Los policías fueron secuestrados por las FARC el 25 de enero de 2013, en una zona cercana al Valle del Cauca. Esta es la segunda liberación en la que participa el Comité de la Cruz Roja en lo que va de 2013. El año pasado la organización participó en la liberación de 36 personas, según su comunicado de prensa.