Por Kathleen Toner
Xenia, OHIO (CNN) — Karen Shirk ha pasado 15 años uniendo a personas con perros de servicio que pueden ayudarlas con sus necesidades especiales y discapacidades.
Con ayuda de su personal, reflexiona mucho sobre el proceso para elegir el perro adecuado para cada quien.
Pero una historia reciente, que incluye a un veterano de la guerra en Afganistán y a un pastor alemán llamado Gabriel, la ha convencido de que en ocasiones hay fuerzas superiores en operación.
Comenzó en marzo, cuando Shirk recibió un correo electrónico del Sargento del Ejército de Estados Unidos Derek McConnell. McConnell había perdido ambas piernas por un artefacto explosivo improvisado (IED, por sus siglas en inglés), y estaba desesperado por conseguir un perro de servicio mientras se recuperaba en el Walter Reed Medical Center en Washington.
Shirk sabía que Gabriel, un perro que estaban en fase de entrenamiento en ese momento, sería perfecto para él.
“Le envié una fotografía de Gabriel y dije, ‘te agrada este perro?’” dijo Shirk. “Estaba tan emocionado…me enviaba mensajes de texto a diario”.
Ella entendió que McConnell estaba ansioso por tener la compañía de un perro de servicio y la independencia que éste le podía proporcionar.
“A los soldados no les gusta que las personas hagan cosas por ellos”, dijo Shirk, quien fue honrado como Héroe de CNN por su trabajo con niños autistas y con necesidades especiales. “Si tienen que pedir todo el tiempo a alguien que arregle sus cosas o decir ‘Acércame mi silla de ruedas’, se vuelven dependientes de otra persona… Un perro de servicio les da la oportunidad de hacerlo ellos mismos”.
Shirk y McConnell se hicieron amigos y a ella le impactó su generosidad. Aunque ella le daría el perro sin costo, normalmente solicita a los civiles que contribuyan con algo para cubrir los costos del entrenamiento del perro. Así que McConnell comenzó a planear maneras de ayudar a reunir el dinero.
Y un día, Shirk no supo más de él.
“Entré a su página de Facebook y el primer comentario que vi decía, ‘Fuiste el joven más maravilloso’”, dijo. “Y yo pensé, ¿fuiste?”.
Shirk estaba devastada al saber que McConnell había fallecido la noche anterior debido a complicaciones relacionadas con sus heridas. Pronto decidió que la mejor manera de honrarlo era colocar a Gabriel con otro soldado discapacitado.
Contactó a alguien que conocía en el ejército y pidió ayuda.
“Dije, ¡encuéntrenme a otro Derek!”, recuerda.
En pocos días, Lisa Murphy escuchó acerca del perro en la Yellow Ribbon Fund, una beneficencia localizada en Maryland que ayuda a veteranos heridos a recuperarse.
“Alguien le hizo saber que este grupo buscaba a un soldado amputado para conectarlo con un perro de servicio”, dijo el esposo de Lisa, el capitán del Ejército de Estados Unidos, Jake Murphy. “Yo mismo quería uno, así que Lisa aprovechó la oportunidad”.
Murphy, al igual que McConnell, había perdido ambas piernas en Afganistán, aunque Shirk pronto descubrió que tenían mucho más en común.
Supo que ambos habían pertenecido a la misma unidad y habían resultado heridos el mismo día. De hecho, McConnell colaboró en la evacuación médica de Murphy, solo unas horas antes de sufrir sus propias heridas.
También, ambos se recuperaron en el mismo hospital, Walter Reed y se hicieron amigos durante las terapias.
A Shirk le impactaron estas coincidencias, ya que había contactado a ambos hombres a través de canales diferentes.
“Es de esas historias que suceden una vez en la vida”, dijo. “Simplemente creo que estaba destinado a suceder”.
Murphy reconoce que es una coincidencia poco común, pero no lo ve de la misma manera.
“Si fue el destino, entonces Derek debía morir, así que no me gusta pensar en eso”, dijo. “Pero si Derek no puede estar aquí, es adecuado que Gabriel sea mi perro de servicio”.
“Hay una conexión entre nosotros… siempre llevaré a Derek en mis pensamientos”, añadió.
Shirk mencionó que este episodio ha renovado su deseo de trabajar con veteranos.
Derek y Jake perdieron su independencia por otros.
“A esos veteranos es a los que quiero ayudar”, dijo. “Espero que más de estos soldados heridos vengan en busca de perros”.
“Estamos listos. Pueden venir todos y los apoyaremos”.