Por Vladimir Dinets, especial para CNN

Nota del editor: Vladimir Dinets, zoólogo nacido en Moscú, escribió el libro Dragon Songs: Love and Adventure Among Crocodiles, Alligators and Other Dinosaur Relations. Es profesor asistente de investigación en la Universidad de Tennessee en Knoxville.

(CNN) — Los lagartos pueden bailar.

Tanto ellos como sus primos —los cocodrilos, los caimanes y los gaviales— también pueden cantar como las aves, aunque la mayoría suenan como motores de diesel o como una motosierra. Algunos miembros del orden Crocodilia, al que pertenecen todos estos animales, pueden colocar palitos en sus fauces para atraer a las garcetas que buscan material para construir sus nidos. Durante los ocho años que he estudiado a estos reptiles, mis investigaciones me han llevado a 26 países en cinco continentes.

Disfruto tanto a los animales como a los viajes, estudiar los aspectos difíciles de la vida de las creaturas famosas y explorar los rincones más remotos del mundo en busca de las especies más enigmáticas.

Estos son algunos de los mejores sitios para ver animales inusuales en estado salvaje. Algunos son fáciles de visitar, mientras que otros requieren que hagas ciertos ajustes si tienes estándares occidentales de seguridad, comodidad e higiene personal.

Parque Nacional Everglades, Florida

¿Alguna vez has visto bailar a un lagarto? Millones de personas visitan este parque nacional de Estados Unidos para ver a los lagartos y a los cocodrilos, pero algunos de los secretos de estos animales estuvieron ocultos hasta hace poco.

Durante la primera semana de mi investigación de doctorado, en 2005, descubrí los “bailes de lagartos”, reuniones nocturnas de apareamiento a las que acuden hasta 100 reptiles. Los llamo “bailes” porque me recuerdan a las reuniones en mi pueblo, a los que la gente acude sola o con su pareja para comunicarse, coquetear, contonearse, presumir, emparejarse e incluso pelear.

A dónde ir: Es posible ver el espectáculo hasta ya entrada la noche, a finales de abril. Tan solo camina hacia el final del paseo Anhinga Trail en el parque con tu linterna.

Península de la bahía de Monterey, California

El área de la bahía de Monterey, que comprende a la ciudad de Monterey y a otros pueblos de la costa central de California, EU, es el mejor lugar para ver mamíferos marinos después de la Antártida. Puedes ver focas elefante, focas moteadas, leones marinos, ballenas, delfines, marsopas, nutrias marinas y más de 20 especies de mamíferos marinos, si tienes suerte.

El océano está tranquilo en agosto y septiembre, al mismo tiempo llegan grandes manadas de ballenas para darse un festín.

A dónde ir: En la ciudad de Monterey, puedes dirigirte al océano para ver nutrias marinas, focas moteadas y leones marinos. También puedes tomar un paseo de avistamiento de ballenas para observar a las ballenas grises (en invierno y primavera), a las ballenas azules y a las jorobadas (en verano y otoño) y, con suerte, orcas, delfines, marsopas y cualquier animal que pase por allí. Dirígete al Parque Estatal Año Nuevo para ver focas elefante y al Parque Estatal Point Lobos para ver más focas y nutrias marinas.

Este de Quebec, Canadá

Es una parte asombrosa del continente, allí me sumergí con los tiburones gigantes de Groenlandia, acaricié a un cachorro de foca, remé alrededor de un enorme cráter creado por la caída de un meteorito y vi muy de cerca una enorme colonia de alcatraces.

Julio y agosto son buenos meses para bucear y observar aves, noviembre es bueno para observar auroras boreales y los cachorros de foca aparecen en marzo.

A dónde ir: Los mejores lugares para visitar son la isla Bonaventura, que cuenta con la mayor colonia de alcatraces de Norteamérica y es un buen sitio para observar focas y ballenas en verano; las islas de la Madeleine, donde puedes hacer un recorrido en helicóptero para ver focas arpa y focas capuchinas en marzo; la bahía Comeau es un buen lugar para bucear, y el camino a la bahía Goose es ideal para ver paisajes y fauna árticos, además del cráter Manicouagan.

Rancho Karanambu, Guyana

Este es mi rincón favorito del Amazonas, aquí observé a los caimanes en 2007. Está bellamente conservado y cuenta con kilómetros y kilómetros de lagos cubiertos con lirios acuáticos, bosques inmaculados, ríos tranquilos y sabanas exuberantes.

A dónde ir: La cabaña Karanambu es una reserva privada en la que casi no hay cacería, así que los monos, las aves, las nutrias gigantes, los osos hormigueros y otros animales son dóciles y fáciles de observar.

Parque Nacional de Etosha, Namibia

Etosha es mi lugar favorito en África para observar fauna silvestre. Es particularmente bueno si tienes niños porque es de fácil acceso; los campamentos son muy cómodos y seguros; hay una gran tienda con toda clase de suministros y siempre hay grandes cantidades de animales.

A dónde ir: En agosto y septiembre puedes sentarte en una banca de cara a un bebedero y contar interminables manadas de antílopes, cebras, elefantes, jirafas y otros animales que llegan del desierto. Es un espectáculo de fauna mejor que el de la popular migración del Serengueti.

Península de Masoala, Madagascar

Madagascar tiene tal cantidad de biodiversidad que los biólogos la consideran un pequeño continente y no una isla grande. Masoala tiene el bosque lluvioso de tierras bajas más grande que queda en la región; aún está relativamente inmaculado y contiene muchas especies de plantas y animales aún no descritos, además de los hermosos lémures, los geckos más extraños y camaleones del tamaño de un fósforo.

A dónde ir: Visita el Parque Nacional Masoala, en donde puedes organizar una gran variedad de caminatas, recorridos guiados o acampar.

Península de Chukchi, Rusia

Chukotka es uno de mis sitios favoritos para observar fauna en Rusia. Es la parte más remota y fascinante de Siberia; la exploré durante mis vacaciones de verano cuando era estudiante y allí dirigí recorridos de observación de aves.

A dónde ir: La entrada a la península es la ciudad de Anadyr, donde puedes esnorquelear con ballenas beluga y ver muchas especies raras de aves justo afuera del aeropuerto. Casi no hay infraestructura, pero si logras alejarte de las zonas pobladas, es maravilloso.

Autopista Karakoram, China/Pakistán

Es la carretera más escénica del mundo y cruza una zona con una asombrosa diversidad cultural. No siempre es seguro ir, pero cuando lo es, es una gran aventura. Exploré el lado chino en 1993, cuando viajé de “aventón” por China durante cuatro meses y visité la parte pakistaní en 2004, cuando buscaba a la ardilla voladora lanuda, una de las más grandes e inusuales del mundo. Finalmente encontré una durante una noche mágica de invierno, en los bosques nevados de Nanga Parbat, el pico más al occidente del Himalaya.

A dónde ir (si te atreves): No siempre es un viaje seguro. Desde la parte pakistaní de la carretera, me gusta viajar hacia el Campamento Base del Nanga Parbat, ir hacia los castillos antiguos del valle de Hunza o subir a los numerosos glaciares que terminan cerca de la carretera.

En China, la región que está entre Muztagata y los picos Kungur cuenta con varios lagos y paisajes espléndidos de ambos picos, además de un campamento en el que puedes quedarte en un yurt (una especie de tienda de campaña) kirguís.

La zona de cruce fronterizo es una reserva natural en la que abundan los íbices, las ovejas gigantes de Marco Polo y los leopardos de las nieves. Del lado chino de la reserva se encuentra la Reserva Natural de Taxkorgan. Del lado pakistaní está el Parque Nacional Khunjerab.

Desierto de Afar, Etiopía

Tal vez es el desierto más cálido del mundo, también es inhóspito y peligroso para los viajeros. Afar es famoso por ser el lugar en el que la corteza terrestre se fractura mientras África se aleja lentamente de Asia. Hice un viaje adicional allí cuando recorrí Etiopía en busca de lugares para estudiar cocodrilos.

A dónde ir (si te atreves): Hay un lago de lava hirviente en el cráter del volcán Erta Ale; están los manantiales de aguas termales más extraños del mundo en el volcán Dallol y unas hermosas cascadas ocultas en unos cañones remotos. Buscar estos bebederos en un desierto sin caminos es un divertido juego en busca del tesoro, pero puedes morir si fallas. Planéalo cuidadosamente.

República Democrática del Congo

Es el país más diverso de África, biológicamente hablando, y está lleno de fauna misteriosa como los bonobos, los okapis, los pavorreales africanos y la musaraña acorazada. Todavía hay grandes descubrimientos de animales allí, pero algunos, como las jinetas acuáticas, nunca habían sido vistas en estado silvestre. He estado en los confines de este reino fascinante y espero explorarlo a conciencia algún día.

A dónde ir (si te atreves): En el Parque Nacional de Virunga hay un lago de lava ardiente y hay gorilas de montaña y de tierras bajas. En elbosque de Ituri hay okapis y otros animales exóticos. En las montañas Itombwe hay muchas plantas y animales únicos. Toma en cuenta que a causa del conflicto político violento que ocurre en el Congo, es un lugar difícil para los turistas.

Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Vladimir Dinets.