Por Daisy Carrington, for CNN
(CNN) – Los aeropuertos no son exactamente zonas libres de estrés, al menos no por ahora.
Pero sin duda, eso es algo en lo que los gerentes de los aeropuertos están trabajando.
Aun así, todos los spas, estudios de yoga y cines en el mundo no pueden restarle valor a la principal fuente de ansiedad al viajar: las extenuantes filas.
Se trata de una irritante característica que pronto podría convertirse en reliquia, gracias a la llegada de la tecnología móvil de rastreo.
El aeropuerto de Helsinki recientemente se convirtió en el primero en el mundo en rastrear los movimientos de los pasajeros en tiempo real, desde el estacionamiento hasta la puerta de salida.
“La idea es lograr un mejor análisis del flujo de pasajeros. En realidad, es solo porque queremos saber de mejor manera dónde se forman las aglomeraciones en el aeropuerto durante la hora pico”, dice Jarnon Putta, vicepresidente y director de información en la Corporación Finavia, la cual administra el aeropuerto.
Mientras tanto, los pasajeros pueden recibir actualizaciones del estado de su vuelo, señalar dónde se estacionaron (para que puedan encontrar su auto después de su vuelo de regreso) y calcular cuánto tiempo les tomará pasar por seguridad.
Una vez dentro, cuando pasan por tiendas que se han asociado, pueden recibir ofertas.
Si bien recibir actualizaciones directamente al teléfono de una persona podría parecer intrusivo, Putta es categórico cuando afirma que el sistema no recolecta ninguna información personal.
En cambio, utiliza iBeacons y routers con red inalámbrica para recolectar números únicos de identificación (o direcciones MAC), y solo lo hace de los dispositivos que tengan la red inalámbrica activada.
“Las direcciones MAC que usamos están codificadas, lo que significa que no es posible identificar a nadie”, dice.
EasyJet hace uso de inspecciones con drones
EasyJet está probando una tecnología similar en los aeropuertos de Londres-Gatwick, Luton y Charles de Gaulle en París, los cuales también están usando iBeacon.
La aerolínea está empezando poco a poco; ha colocado dispositivos en los sitios de entrega de equipaje y en áreas de seguridad.
La aplicación EasyJet también usa la tecnología para avisarle a los pasajeros que deben preparar sus documentos en puntos clave.
Aunque todavía está en sus primeras etapas, James Millet, el director del área digital, prevé que la tecnología tendrá usos de mayor alcance.
“Con el tiempo, podríamos ver aplicaciones que respalden desafíos individuales, como cuando un cliente tiene que estar en una ubicación distinta porque lleva esquís, o cuando no lleva equipaje”, dice.
La aerolínea europea de bajo costo ha estado a la vanguardia en la utilización de la tecnología más reciente.
En mayo, empezó a probar la inspección por medio de drones en su flota de aviones Airbus A319 y A320.
La aerolínea también está estudiando el uso de los lentes de realidad virtual para permitir que los ingenieros y pilotos tomen fotos de posibles problemas, y las envíen directamente a la base.
“Este es otro buen ejemplo de cómo estamos aplicando las nuevas tecnologías a nuestros negocios para ayudarnos a ser más efectivos y eficientes”, dice Millett.
Los pasajeros necesitan el poder para negarse
No todo el mundo está cómodo con la nueva tecnología.
“¿A quién no lo asustaría la idea de que rastreen tu teléfono? Si te digo que alguien te está siguiendo, y no te digo por qué, por supuesto que te alterarías”, dice Jules Polonetsky, director ejecutivo y copresidente de Future of Privacy Fórum, una organización de investigación con sede en Washington.
Él añade que, contrario a lo que podría parecer, el rastreo en los aeropuertos se mantiene a un nivel bastante general.
“No es como si informara ‘oigan, este teléfono le pertenece al sujeto con lentes azules y maleta desgastada’. Lo que se informa es ’38.000 dispositivos estuvieron en esta ubicación en este horario’. Es de importancia fundamental que los aeropuertos y los minoristas desmitifiquen los usos de esta tecnología para los usuarios”.
La transparencia es clave, dice Polonetsky, y los aeropuertos tienen que asegurarse de alertar a los pasajeros en cuanto al cuándo, cómo y por qué de esta tecnología, y proporcionarles la opción de optar por no participar. Esto es algo que tanto EasyJet como el aeropuerto de Helsinki hacen.
Los pasajeros que no desean ser rastreados pueden desconectar Wi-Fi en sus dispositivos, o proporcionar su dirección MAC a walkbase.com y smart-places.org. (Al hacerlo, el sistema de rastreo sabe que debe ignorar la dirección en el futuro).
Sin embargo, principalmente, él reconoce los posibles usos de esta tecnología en los aeropuertos.
“Un aeropuerto es el tipo de lugar donde probablemente quieras recibir alertas sobre los cambios de puertas, o averiguar dónde puedes comprar una taza de café media vez te has registrado, u obtener información sobre cuánto tiempo te tomará hacerlo”, dice.
“Es un espacio grande y cualquier cosa que el lugar pueda hacer para ayudarme a recorrerlo con facilidad y rapidez será útil”.