(CNN Español) – Familias enteras se han visto separadas de la noche a la mañana producto de la deportación de alguno de sus miembros.
Según fuentes oficiales de ambos países, más de mil colombianos indocumentados han sido repatriados desde Venezuela cuando este país decretó estado de excepción en 6 municipios fronterizos como una medida para frenar el “paramilitarismo, la violencia y el contrabando de extracción”, tal y como afirma el gobierno venezolano.
Liliana Rodríguez y su esposo, Ricardo Peña, son colombianos indocumentados que se vieron afectados por la decisión venezolana de deportar a los que consideran ilegales.
Un ataque de asma de su hijo de seis anos y la intervención de uno de un guardias venezolanos que participaba en el operativo de desalojo impidió que se llevaran a Liliana a Colombia. Ricardo tuvo que salir del país.
Al otro lado de la frontera localizamos esposo de Liliana en un albergue en La Parada.
Tal como contó su esposa, él se encuentra con cientos de deportados, ha recibido ayuda humanitaria pero su preocupación principal es su familia.
Ricardo —que llevaba dos décadas en Venezuela— dice que duerme poco, come una vez al día y solo le queda esperar.
Entre lágrimas envía un mensaje a su esposa “La sigo queriendo. A los hijos, que me esperen, algún día tenemos que estar juntos”.
Con información de Laura Castellanos y Fernando Ramos.