(CNN Español)– Río de Janeiro prohibió las operaciones del servicio de transporte Uber, siendo la primera ciudad brasileña en hacerlo.
El alcalde Eduardo Paes firmó la legislación que establece multas de 2.000 reales (más de 500 dólares) a los conductores de Uber que violen la prohibición.
La legislación incluye todos los servicios de transporte basados en el uso de aplicaciones para smartphones, de los cuales Uber es el dominante.
En Río, el gobierno de la ciudad planea crear en breve su propia aplicación, gratis para los clientes y que incluirá una función para las personas que presenten quejas, informaron medios estatales.
“Es un día triste para Río de Janeiro”, dijo Uber en un comunicado, afirmando que el servicio es legal bajo las leyes federales.
Los taxistas en varios países han ido a la huelga y protagonizado protestas, frustrados con lo que dicen es una disminución en sus negocios por la irrupción de Uber. Los reguladores, por su parte, han acusado a los conductores de Uber de funcionar sin licencias oficiales.