(CNN) – Apenas horas antes de que la Marina se dirigiera a lo que creían que eran los restos del buque estadounidense perdido El Faro, los abogados de los propietarios del buque se fueron a corte en una acción a la que un abogado de derecho marítimo se refirió como “una gran falta de insensibilidad para las familias” de la tripulación del buque hundido
En una demanda presentada el viernes en la Corte de Distrito de Estados Unidos en Florida, el propietario de El Faro, TOTE Maritime, solicita “exoneración de o limitación de responsabilidad” en cualquiera de las demandas que las familias de los miembros de la tripulación pudieran presentar.
La compañía dice que “ejerció la debida diligencia” para asegurarse de que el buque, de 40 años de antigüedad, estaba en condiciones de navegar y bien equipado para su viaje del 29 de septiembre desde Jacksonville, Florida, a San Juan, Puerto Rico, y por lo tanto debe ser” (exonerado) de responsabilidad por cualquier pérdida o daños sufridos durante el viaje… y de cualquiera y todos los reclamos por daños y perjuicios que han sido hechos o que se hagan en el futuro”.
El buque El Faro desapareció el 1 de octubre a unas 30 millas náuticas frente a las Bahamas, mientras que el huracán Joaquín hacía estragos en la región. El enorme barco desapareció con 33 tripulantes a bordo… en el mes posterior, los restos de un cuerpo no identificado y varias piezas de escombros son todo lo que se ha recuperado.
Las familias de cuatro miembros de la tripulación ya han presentado demandas contra TOTE con el argumento de que el buque El Faro tenía un historial de mantenimiento de mala calidad y que fue imprudente navegar a sabiendas hacia un huracán.
Pero la acción judicial de TOTE del viernes impedirá que cualquier otra familia haga lo mismo hasta que un juez decida sobre la denuncia, de acuerdo con Kurt Arnold, un abogado que representa a la familia de uno de esos cuatro miembros de la tripulación.
“Es agresivo porque sucedió muy rápido”, dijo Arnold, quien reside en Houston, respecto a la acción legal de los propietarios del buque. “(TOTE) está adelantándose mientras que las familias todavía (están) en duelo… tan solo hace tres semanas le pusieron fin a la búsqueda de (los tripulantes)”.
Daniel Rose, un abogado de derecho marítimo que actualmente no participa en ningún litigio relacionado con El Faro, estuvo de acuerdo, y le dijo a CNN que la maniobra llegó “demasiado pronto” y la calificó como “altamente insensible para las familias”.
“Los restos aún no había sido identificados ni mucho menos recuperados”, dijo Rose. “TOTE tenía seis meses para presentar una acción de limitación. Deberían haber esperado para ver si se encontraban los restos de la nave –lo que parece probable– y si se recuperaban a los seres queridos, en lugar de abofetear a las familias con una demanda”.
Al mismo tiempo, Rose dijo que la acción de TOTE era de esperarse. “Desafortunadamente, (esto) no es una sorpresa para esta industria”.
TOTE envió una declaración a CNN diciendo que “la empresa no va a discutir acciones legales individuales por respeto a los procesos legales. Nuestro objetivo sigue siendo el apoyo y la atención a las familias y sus seres queridos”.
¿Acaso la culpa es del capitán?
Tanto Arnold como Scott Wagner, un abogado que representa a la familia del miembro de la tripulación de El Faro, Jackie Jones Jr., le dijeron a CNN que parece que TOTE no solo está tratando de evitar la culpa, sino que desea dirigirla –por cualquier reclamo que pueda venir– directamente hacia el capitán de la nave, Michael Davidson.
“Sin duda, ellos están haciendo un movimiento calculado para echarle esto encima al capitán”, dijo Wagner, quien añadió que la presentación de esta demanda abre la posibilidad de demandas en contra de los bienes de Davidson.
Arnold estuvo de acuerdo, e hizo mención del lenguaje con el que cuidadosamente redactaron la demanda de TOTE y el que explica en detalle cómo todo estaba adecuado y normal en lo que respecta a la compañía antes de que el buque El Faro saliera del Puerto de Jacksonville el 29 de septiembre –incluyendo el plan de la nave para evitar la que entonces era la tormenta tropical Joaquín, la cual se agitaba en el Atlántico, pero que se había pronosticado que se convertiría en un huracán. si culaquiera de las decisiones hechas despues de la salida lo llevo a su naufragio, los propietarios del buque argumentaron: “ese tipo de error fue ocasionado y se produjo sin conocimiento de (TOTE)”.
TOTE señala hacia un cambio de rumbo ordenado por el capitán de una vez que la nave estaba en el mar. “Después de la salida y durante el viaje, (el capitán Davidson) alteró el curso previsto para el buque EL FARO para explicar el curso del huracán. (…)”
Pero Wagner no se traga el anzuelo. Él dijo que TOTE estaba íntimamente involucrado y que era responsable de cualquiera y todas las decisiones que se tomaron en el mar, sin importar que la decisión haya sido tomada después de su partida.
“Ellos están actuando como si no sabían lo que estaba pasando, (pero) no hay una sola maldita cosa que la tripulación pueda hacer sin que los propietarios les indiquen qué hacer”, dijo. “Hoy en día, la tecnología es tan buena que estos propietarios están en comunicación con el capitán a cada paso del camino. Ellos prácticamente están en el barco, así que el hecho de que TOTE presente una demanda de responsabilidad limitada y que diga que no sabía lo que estaba pasando es incorrecto”, dijo.
Rose, socio de la firma de abogados de Nueva York Kreindler & Kreindler, dijo que “a TOTE no le hace ningún bien culpar al capitán puesto que sus acciones u omisiones, de todas formas, probablemente se le imputarán a ellos”, y calificó el hecho de trasladarle la culpa al capitán como “una postura más que una estrategia legal prudente”.
“En primer lugar, es obvio que el capitán, de forma individual, no es una fuente realista de recuperación para las familias”, dijo Rose. “En segundo lugar, la única razón para afirmar las acusaciones contra el capitán es imputarle sus actos u omisiones a TOTE, pero todavía tiene que hacerse de una manera en que se frustre la limitación. El simple hecho de demandar al capitán no es algo que logre eso”.
TOTE tiene la esperanza de que la ley ‘arcaica’ limite su responsabilidad
Pero incluso después de presentar su caso para que no se le haga responsable, TOTE, no obstante, intentó escaparse por la tangente en su reclamo, al citar lo que Arnold llamó una ley marítima ‘arcaica’ del siglo XIX para limitar cuánto podría tener que pagar la compañía.
“(Si a TOTE) se le juzga responsable (…) tal responsabilidad se limitará al valor del interés de (TOTE) en El Faro, incluyendo su transporte pendiente para el final del viaje, y 420 dólares por fondo de la tonelada de registro bruto para los demandantes por muerte”, dijo la compañía en su denuncia.
Pero, explica Arnold, eso no es exactamente un gesto magnánimo, porque al final del viaje los intereses de TOTE en los contenedores de 737 pies fueron de 0 dólares, puesto que se perdió en el mar. Eso deja solamente 420 dólares por tonelada bruta registrada de la carga pendiente –una cantidad que viene del siglo XIX, según Arnold– que sería lo elegible a lo que cada demandante por muerte pudiera pretender. Con las toneladas registradas que El Faro estaba transportando en su último viaje, esa cantidad resulta ser aproximadamente de 15,3 millones de dólares o aproximadamente 464.000 dólares por cada una de las 33 vidas perdidas.
Arnold dijo que la maniobra legal, a la cual se refirió como “una herramienta ofensiva para los demandados”, se levanta en contraste directo frente a las declaraciones que TOTE hizo públicamente.
“Ellos no tendrían que haber presentado una acción de limitación”, dijo Arnold, quien representó a varias familias que demandaron a BP y a Transocean en el desastre Deepwater Horizon en 2010. “Por un lado, ellos hicieron declaraciones a la prensa respecto a que sus corazones y sus pensamientos estaban junto con las familias mientras que, por otro lado, sus abogados estaban en el tribunal federal intentando encontrar a un juez para limitar los daños”.
En sus declaraciones a CNN, TOTE reconoció su demanda, pero dijo que aún permanecía enfocado en “proporcionarle atención y apoyo” a las familias de los miembros de la tripulación.
“Confirmamos que las familias han sido contactadas respecto a la compensación”, continuaba el anuncio de TOTE. “De hecho, nosotros entendemos que en estas difíciles y trágicas circunstancias, un número de familias pueden estar sufriendo fuertes presiones financieras y queremos asegurarles que nosotros estaremos allí para ayudarlos inmediatamente. Todos los detalles de estas discusiones son, por supuesto, confidenciales entre las partes como debe ser. Nuestros esfuerzos permanecen enfocados en proporcionarles atención y apoyo, y este es un paso para aquellos que puedan elegirlo”.