(CNN) – Mientras las autoridades trabajan en maneras eficaces y avanzadas para contrarrestar el creciente número de drones zumbando en nuestros cielos, la policía holandesa llegó con algo un poco más inusual: águilas.
En lo que la compañía holandesa Guard from Above llama una “solución de baja tecnología para un problema de alta tecnología”, las aves están siendo entrenadas para ‘cazar’ a los intrusos electrónicos no deseados.
“Dos de las características más impresionantes de las aves rapaces son su velocidad y su poder”, dijo Ben de Keijzer, cofundador de Guard from Above, en un comunicado de prensa.
“A veces la solución a un problema hipermoderno es más obvia de lo que piensas”.
Un problema creciente
En octubre de 2015, en respuesta a informes de pilotos sobre 100 avistamientos de aviones no tripulados en un mes, la Administración Federal de Aviación anunció que estaba probando una tecnología anti-drones que contrarrestar la presencia de estos aviones no tripulados que vuelan en un radio de 8 kilómetros de aeropuertos seleccionados.
La tecnología detecta las señales de radio de los drones y utiliza mecanismos de rastreo para forzar al avión no tripulado a aterrizar.
El proyecto se quedó en la etapa de investigación.