Signos de Médicos Sin Fronteras reposan sobre los escombros de un hospital bombardeado en Siria el 15 de febrero de 2015.

(CNN) – Ataques aéreos sobre dos hospitales en diferentes puntos de Siria este lunes dejaron al menos 24 muertos, ocho desaparecidos y decenas de heridos.

Al menos 15 personas murieron y otras 40 resultaron heridas cuando un hospital de mujeres y niños fue alcanzado por un bombardeo en Azaz, ciudad al noreste de Siria.

Un trabajador del hospital conocido como Moudhar dijo que entre los muertos hay mujeres y niños y que los heridos fueron trasladados a la frontera con Turquía.

El trabajador del hospital dijo que hubo cinco ataques sobre Azaz este lunes.

En un incidente separado, un bombardeo destruyó este lunes una “estructura” médica apoyada por Médicos sin Fronteras en la ciudad de Idlib y mató a siete personas. MSF dijo que además, ocho trabajadores de la organización están desaparecidos tras lo que llamó un “ataque deliberado sobre una estructura médica”.

El hospital en Ma’arat Al Numan fue golpeado por cuatro misiles en dos ataques con pocos minutos de diferencia, según personal del hospital.

Otras 15 casas y edificios localizados en zonas populadas del área fueron destruidas, incluyendo reportes de otro hospital que no es parte de MSF.

“Condenamos este ataque en los términos más fuertes posibles”, dijo Massimiliano Rebaudengo, jefe de la misión de la organización.

“La destrucción de instalaciones que apoyan a MSF parece un ataque deliberado a la estructura de salud”, denunció Rebaudengo,

Según un comunicado de la organización, el hospital fue golpeado cuatro veces en dos series de ataques.

“La destrucción del hospital deja a alrededor de 40.000 personas sin acceso a servicios médicos en una zona de conflicto activo”, agregó Rebaudengo.

MSF está apoyando el hospital desde septiembre de 2015 y cubría todas sus necesidades, incluyendo la provisión de los suministros médicos y los gastos.

Otro hospital apoyado por MSF fue alcanzado por bombardeos la semana pasada en la ciudad de Daraa, al sureste de Siria, causando tres muertos.