Imagen de las huellas sobre la tapa del ataúd.

(CNN) – Investigadores del Museo Fitzwilliam de Cambridge, en el Reino Unido, descubrieron huellas dactilares de 3.000 años de antigüedad, en la tapa de un ataúd egipcio.

“Las huellas las dejaron los artesanos que cometieron un error y lo tocaron antes de que el barniz se secara”, dijo Helen Strudwick, egiptóloga del museo, a CNN. “El hallazgo es de 2005, pero no se ha publicado hasta ahora”.

Este hallazgo, junto con otros descubrimientos en relación con el conjunto de ataúdes, “nos acercan a las personas que hicieron los ataúdes”, dijo el museo en un comunicado.

Se cree que el ataúd perteneció a un sacerdote llamado Nespawershefyt, también conocido como Nes-Amun, que era el jefe de los escribas del templo de Amun-Re, en Tebas, dijo el museo.

Los ataúdes, que datan del año 1000 aC, fueron sometidos a extensas pruebas complementarias, incluyendo rayos X, que revelaron información acerca de cómo se hacían los ataúdes egipcios hace 3.000 años.

“La caja de ataúd interior se compone de una multitud de piezas de madera, que incluyen secciones de al menos un ataúd más viejo”, explicó Julie Dawson, jefe de Conservación en el Museo Fitzwillliam, en el comunicado.

“La evidencia de reutilización incluye cortes a través de viejos, parches para cambiar el perfil del ataúd y una serie de viejos agujeros que fueron rellenados. La madera era un bien muy preciado y los artesanos dominaban increíblemente la fabricación de estos objetos complejos a partir de materiales de partida a veces poco prometedores”.

El conjunto de ataúdes estará en exhibición en “Muerte en el Nilo”, una nueva exposición a partir de este 23 de febrero que se centra en cómo evolucionó el diseño del ataúd egipcio a lo largo de 4.000 años.