(CNN) – Desde que el presidente Obama restauró las relaciones diplomáticas con Cuba, ha habido interminables titulares que presagian la reducción de las restricciones de viajes para los ciudadanos estadounidenses.
Con la próxima reanudación de los vuelos comerciales y con un mayor levantamiento de las restricciones antes de la visita que Obama hará a la isla, la emoción está aumentando más rápido que nunca.
Desafortunadamente, los cambios han sido instituidos a modo de una lista que en ocasiones es contradictoria, la cual describe principios que son simplemente desconcertantes. Con tanta ambigüedad, descifrar las nuevas políticas hace que la ciencia de cohetes parezca algo rudimentario.
A través de una cuidadosa revisión de las reformas hemos logrado resolver la confusión. He aquí una dosis de claridad para los viajeros estadounidenses que tengan el deseo de visitar Cuba.
Entonces… ¿el turismo estadounidense es o no legal en Cuba?
Aunque Estados Unidos y Cuba han retomado las relaciones diplomáticas, ambos países para nada lo han resuelto todo. Los viajes turísticos generales hacia Cuba siguen siendo ilegales bajo las leyes en Estados Unidos.
Hasta que el Congreso decida lo contrario, los ciudadanos estadounidenses y los residentes permanentes tienen prohibidos los viajes a Cuba con el único propósito de tomar el sol en la playa y beber daiquiris.
Si el Departamento del Tesoro de Estados Unidos descubriera que un estadounidense participó en tales actividades ilícitas, él o ella podría ser sujeto a castigos legales.
Aún está por verse qué tan rigurosamente será monitoreado el turismo ilegal.
¿Por qué todos dicen que más estadounidenses pueden viajar a Cuba?
Antes de 2015, si un estadounidense quería visitar la isla, por ejemplo una bióloga marina que estudiaba los arrecifes de coral de Cuba (llamémosla Jane Smith), ella tendría que haber obtenido una licencia de viajes del Departamento del Tesoro de EE.UU. por medio de un prolongado proceso de solicitud.
Lo que ha cambiado es que este prolongado proceso de autorización ha sido eliminado para ciertos tipos de viajeros, como Jane Smith, quien ahora tiene la libertad de comprar un boleto a Cuba sin obtener una autorización explícita por parte del gobierno de Estados Unidos.
Siempre que el programa de Jane Smith no incluya actividades que no concuerden con un trabajo de investigación de tiempo completo, ahora todo lo que ella tiene que hacer es obtener una visa de turista (distinto a una licencia) y —si viaja directamente desde Estados Unidos— firmar una declaración jurada de su agencia de viajes acerca del propósito de su viaje (detalles abajo).
Ella también tendrá que mantener un registro y guardar los recibos de su viaje durante al menos cinco años, según el Departamento del Tesoro.
Existen 12 amplias categorías de actividades de viajes que han recibido un estatus permanente aprobado con anticipación (PDF):
• Visitar a familiares
• Proyectos humanitarios o viajes para proporcionarle apoyo al pueblo cubano
• Negocios oficiales del gobierno de EE.UU., gobiernos extranjeros y ciertas organizaciones intergubernamentales
• Actividades periodísticas
• Investigaciones profesionales
• Actividades educativas realizadas por personas en instituciones académicas
• Viajes de persona a persona
• Actividades religiosas
• Presentaciones públicas, clínicas, talleres, competencias y exhibiciones atléticas o de otro tipo
• Autorización para brindar servicios de viaje, servicios de traslado y servicios de remesas
• Actividades de fundaciones privadas, institutos educativos o de investigación
• Exportación de ciertos servicios basados en Internet
El 15 de marzo de 2016, el gobierno hizo otro cambio significativo a las reglas en torno a los viajes educativos de persona a persona. Antes del viaje, los estadounidenses debían ser acompañados por una organización patrocinadora sujeta a la jurisdicción estadounidense.
Ahora, los individuos pueden organizar sus propios viajes de persona a persona siempre y cuando tengan un programa a tiempo completo de actividades de intercambio educativo.
Viajar a Cuba efectivamente es más fácil para muchas personas de lo que ha sido en décadas. Simplemente no es que ahora esté abierto a todos como se ha dado a entender.
¿Qué constituye una razón válida para visitar Cuba?
El propósito establecido de tu viaje tiene que concordar con alguna de las 12 categorías pre-aprobadas que mencionamos arriba.
Afortunadamente, parece que con el giro correcto, casi cualquier cosa puede ser una razón válida.
Algunas de las 12 categorías están bien definidas, como ir a Cuba para “visitar familiares” o “asistir a una conferencia profesional”.
Sin embargo, la mayoría cuentan con una definición ambigua, como “actividades periodísticas” o “brindarle apoyo al pueblo cubano”. En la era de las redes sociales donde todos son editores, ¿qué califica como periodismo? (PDF)
Por un lado, tal oscuridad hace que los criterios sean más inclusivos, lo que aparentemente es bien recibido para los posibles viajeros.
Sin embargo, la ambigüedad genera un elemento turbio que la mayoría quisiera obviar en un sistema de autorizaciones propias que conlleva la posibilidad de sufrir consecuencias penales.
¿Quién decide si cumplo con los criterios de esas categorías?
Tú. Las categorías de viajes son de autorización propia.
Lo que una vez era un sistema de solicitud formal en esencia se ha convertido en un sistema de honor en el que tú concluyes si cumples o no con los criterios categóricos.
Aunque no necesitas una licencia, sí necesitas una visa para entrar a Cuba.
Espera, ¿una visa no es lo mismo que una licencia?
Una visa es un documento completamente distinto de la licencia de viajes retirada, y todos los visitantes estadounidenses a Cuba deben tener una a la mano antes de llegar.
Obtener una visa para viajar a Cuba no es tan sencillo como enviar un formulario a la embajada más cercana.
La forma más fácil de obtener una visa es a través de una agencia de viajes que se especializa en viajes a Cuba, como Cuba Travel Services o ABC Charters, quienes rápidamente procesan solicitudes de visa internamente.
Puedes recibir tu visa por correo (toma hasta cuatro semanas), o puedes hacer arreglos para recogerla en el aeropuerto de Estados Unidos de donde saldrás.
Si quieres hacer todos tus planes de viaje sin una agencia de viajes, puedes reservar tus boletos en CheapAir.com, y la compañía te ayudará para que obtengas tu visa.
Los visitantes de Estados Unidos que viajen a Cuba por medio de un país de entrada como Canadá, México o las Bahamas no necesitan sacar su visa con anticipación, debido a que la pueden adquirir en el aeropuerto del país de entrada durante la escala.
Actualmente, las visas cuestan más o menos 25 dólares.
De cualquier forma —ya sea si viajas a través de un país de entrada o vuelas a Cuba directamente desde Estados Unidos— si eres un ciudadano estadounidense o un residente permanente, debes quedar en una de las categorías pre-autorizadas de viajero para que tu viaje sea legal.
¿Puedo volar a Cuba directamente desde Estados Unidos en lugar de pasar por un país de entrada como Canadá o México?
Estados Unidos firmó oficialmente un acuerdo en febrero para volver a establecer los servicios aéreos programados entre Estados Unidos y Cuba.
En marzo, las aerolíneas estadounidenses presentaron solicitudes para rutas específicas. Se espera que el Departamento de Transporte tome una decisión sobre los vuelos este verano.
Mientras tanto, el servicio chárter continuará.
Antes de 2015, solo había unos cuantos vuelos a Cuba desde Estados Unidos, todos eran vuelos chárter y estaban reservados estrictamente para aquellos a quienes les habían sido otorgadas las licencias de viajes. En 2015, varios vuelos chárter diarios y directos desde Nueva York, Miami, Tampa, Los Ángeles y Washington fueron añadidos.
Debido a que los vuelos estrictamente hablando están fuera del alcance del servicio normal de las aerolíneas, ellos pueden ser reservados únicamente por medio del organizador del vuelo chárter, o en algunos casos, en ChepAir.com.
Todos los proveedores estadounidenses que brinden servicios de viajes a Cuba, ya sea una agencia de viajes o un motor de reservas en línea, actualmente requieren que los viajeros estadounidenses que se ajusten a alguna de las 12 categorías pre-autorizadas firmen una declaración jurada (un documento legal vinculante) en la que declaren cuál es la categoría exacta con la que se identifican: por ejemplo, visitar a la familia.
La declaración jurada normalmente es solicitada por el proveedor al mismo tiempo que la compañía procesa la reservación de boleto del viajero.
Aunque el vuelo directo se lleva puntos por conveniencia, en este momento sigue siendo más económico optar por un vuelo dividido en dos etapas: reservar un viaje ida y vuelta desde Estados Unidos hacia un país de entrada como Canadá, México o las Bahamas, y luego un viaje ida y vuelta adicional entre el país de entrada y Cuba.
Volar por las Bahamas generalmente es la opción más económica. Para volar de manera legal a través de un país de entrada, los viajeros estadounidenses de todas formas deben ajustarse a una de las categorías de viajes autorizados.
Probablemente, los vuelos directos entre Estados Unidos y Cuba se volverán más asequibles a medida que se reanuda el servicio comercial programado.
¿Puedo tomar un ferry hacia Cuba?
Quizá en el futuro cercano. Se espera que el servicio regular de ferry desde el sur de Florida hasta Cuba inicie en 2016.
Los viajes inaugurales a bordo de barcos pequeños también están programados para este año.
¿Tengo que usar a un agente de viajes o puedo planificar el viaje yo mismo?
Hay algunos pasos que puedes seguir cuando planifiques un viaje a Cuba.
Sin duda puedes reservar tu viaje por ti mismo, al organizar los vuelos y tu visa por medio de CheapAir. De igual forma, puedes encontrar hospedaje en sitios como WowCuba, Cuba Particular e incluso Airbnb.
Ahora que ha crecido la economía de compartir, más y más viajeros optan por quedarse en casas de huéspedes y opciones de alquileres vacacionales; ellos hacen los arreglos directamente con los dueños cubanos de las propiedades.
Otra opción es trabajar con un agente de viajes solo en la capacidad de organizar vuelos y solicitar la visa, para simplificar el proceso de reservas, mientras planificas tú mismo el resto de las actividades.
Sin embargo, aunque no estás obligado legalmente a participar en un viaje organizado, a fin de asegurarte una plena adhesión a las categorías aprobadas de viajes, esta podría seguir siendo la mejor alternativa por el momento.
Muchos viajeros sugieren trabajar con un tour operador boutique de servicio completo, como Havana VIP Tours.
Estas organizaciones no solo se encargarán de las reservas de vuelo y hospedaje, sino también diseñarán un itinerario especial que se ajuste plenamente al viajero e incluya actividades de inmersión como clases de cocina, talleres de baile, presentaciones de teatro, tours de arquitectura y trabajo de voluntariado.
Otros puntos importantes:
Celulares: los celulares que tengan una tarjeta SIM de una compañía estadounidense no funcionarán en Cuba, así que no esperes encender tu iPhone y navegar como en casa cuando llegues a la isla.
Si tu teléfono no está bloqueado, puedes comprar una tarjeta SIM local que te permitirá hacer llamadas locales y enviar mensajes de texto (no tendrás datos).
Acceso a Internet: incluso con una tarjeta SIM cubana, no tendrás datos en tu celular, lo que representa un fuerte contraste para los estadounidenses que siempre están conectados. El acceso a Internet es limitado en toda la isla, y lo puedes comprar por hora en ciertos lugares.
Con la excepción de unos cuantos puntos de acceso inalámbricos en los hoteles de alta gama, la mayoría de conexiones son por línea conmutada. Por lo tanto, si tienes confirmaciones de reservas u otro papeleo que necesites durante tu viaje, debes imprimirlo antes de salir.
Efectivo: algunas tarjetas emitidas en Estados Unidos ahora funcionan en Cuba, pero las tarjetas de crédito o débito vinculadas con instituciones financieras estadounidenses no funcionan en todas partes.
Debes llevar suficiente efectivo como para cubrir todos tus gastos y un poco más. Además, asegúrate de apartar efectivo para el impuesto de salida que se cobra cuando sales de la isla.
Cambio de dinero: para que obtengas la mejor tasa de cambio, algunos viajeros sugieren convertir los fondos estadounidenses a euros, libras británicas o dólares canadienses antes de cambiar el efectivo a pesos cubanos.
Existe un impuesto de recargo del 10% sobre la tasa de cambio de dólares estadounidenses que no aplica a otras monedas.
Sin embargo, es oportuno analizar las cifras antes de tomar esta ruta para asegurarse de que las ganancias de la conversión del primer paso no superen la evasión del impuesto de recargo del 10%.