(CNN) – “Felicitaciones… Inventaste toda una nueva forma de ser desagradable a 35.000 pies de altura”.
Así decía el tuit de Dante Ramos de que una mujer en la silla de adelante lanzara su cola de caballo en el respaldo del asiento y dejara colgar el cabello directamente sobre la pantalla.
Ramos tomó una foto y rápidamente se volvió viral.
Ramos, columnista de opinión del Boston Globe, escribió una nota sobre el incidente y su efímera fama.
En la columna, el autor lamenta toda la atención que recibió su tuit, comparado con temas más serios de los que ha escrito.
Pero… vamos.
¿Acaso el juicio contra unos profesores universitarios que buscaban formar un sindicato y el viaje de Obama a Cuba (dos de sus columnas recientes) en realidad son tan importantes como el derecho de una persona a no estar incómoda en un vuelo de Houston a Boston?