La chaqueta del traje olímpico australiano.

(CNN) - Parece que las olimpiadas de Río están viviendo otro caso de falsedad de parte de sus atletas de élite.

Nueve australianos fueron multados con 10.000 reales (unos US $ 3.121) cada uno después de “alterar sus acreditaciones” para entrar al estadio de baloncesto en donde la selección de su país jugaba la semifinal olímpica contra Serbia.

Los atletas fueron acusados de usar documentos falsos, dijo la Policía Civil de Río de Janeiro, durante una conferencia de prensa el sábado.

Después de aparecer delante de un juez, en las primeras horas de la mañana, los atletas fueron puestos en libertad bajo fianza de buena conducta por dos años y un compromiso para pagar las multas.

Sus pasaportes fueron confiscados hasta que paguen la multa.

La subjefa de la delegación australiana, Fiona de Jong, se disculpó con la corte y explicó que los atletas estaban apoyando a sus compañeros de equipo. Que no estaban tratando de estafar a nadie, nadie había sufrido una pérdida material y a nadie se hizo daño como resultado del incidente, dijo el equipo olímpico australiano en un comunicado.

Los jugadores de baloncesto de Australia también tuvieron una noche decepcionante, al perder contra Serbia 61-87.

El equipo serbio se enfrentará a la selección de Estados Unidos en la final olímpica de baloncesto.

La jefa de la delegación Australiana, Kitty Chiller, dijo en conferencia de prensa que ya está en curso una investigación interna sobre el incidente, pero aseguró que sus atletas no cometieron ninguna falta.

“Estamos investigando las circunstancias sobre cómo las acreditaciones fueron manipuladas. Completaremos la investigación y luego vamos a saber cómo llegaron los atletas a un lugar con acreditaciones con un código de acceso diferente a las suyas”, agregó Chilller.

Otro incidente en la delegación

No es la primera vez que los atletas australianos han tenido un encuentro con funcionarios de Río 2016.

Después de una gran noche en Copacabana, los nadadores australianos Josh Palmer y Emma McKeon no sólo no lograron volver a tiempo a la Villa Olímpica, la gerencia de la delegación les prohibió asistir a la ceremonia de clausura de los Juegos.

McKeon se quedó fuera de un club nocturno hasta las primeras horas de la mañana, mientras que Palmer se dirigió a un quiosco de la playa con un amigo para seguir bebiendo.

Josh Palmer y Emma McKeon, los nadadores australianos noctámbulos, que fueron sancionados por su comportamiento en Río. . Una vez que el amigo de Palmer se fue, un hombre se le acercó y lo obligó a retirar US$ 1.000 en efectivo de un cajero automático cercano, dijo el nadador a las autoridades. Palmer fue encontrado más tarde por dos hombres quienes reportaron que el australiano estaba desorientado y había perdido su cartera y teléfono. Además de no poder ir a la clausura en Río, Palmer y McKeon tienen prohibido salir de la Villa Olímpica entre las 8 p.m. y las 8 a.m. La delegación australiana también impuso un toque de queda a partir de las 2 a.m. a todos los miembros del equipo para el resto de los Juegos.