(CNN) – La idea de que Mitt Romney se una al gabinete de Donald Trump, dada la hostilidad y los intercambios cargados de veneno entre ambos, podrían ser lo más absurdo de un año totalmente loco en la política de Estados Unidos.
Pero la posibilidad de que Trump y el hombre que lo calificó de “artista del estrangulamiento” encuentren una causa común en el nuevo gobierno se convirtió en un tema candente después de la reunión que mantuvieron el sábado en Bedminster, New Jersey.
El candidato presidencial republicano en 2012, quien alguna vez advirtió en una entrevista con CNN que una presidencia de Trump sería una mezcla de populismo, racismo y fanatismo, ahora se sentó a negociar con Trump la posibilidad de convertirse en secretario de Estado.
Tras la reunión, Trump no ofreció ninguna pista sobre si le ofrecieron algún puesto o si aceptaría algún rol en el gobierno de Trump.
“Tuvimos una amplia conversación en relación con los varios escenarios en el mundo en los que Estados Unidos cuenta con intereses de importancia real.Discutimos esos temas e intercambiamos nuestros puntos de vista”, dijo Romney ante reporteros, sin aceptar preguntas.
El vicepresidente electo Mike Pence confirmó el domingo que Romney estaba siendo considerado para el puesto de secretario de Estado.
“El presidente electo estaba muy agradecido con Romney por haber venido. Tuvieron una buena reunión. Fue un intercambio cálido y sustancioso. Sé que él se encuentra considerado para ser secretario de Estado de Estados Unidos junto con otros notables ciudadanos”, declaró Pence en Fox News Sunday.