(CNN) – Serena Williams volvió a reescribir los libros de historia del tenis una vez más, esta vez con su hermana Venus del otro lado de la red y su prometido Alexis Ohanian en las gradas.
Al vencer Serena a su hermana mayor en la final del Abierto de Australia con marcador de 6-4 y 6-4, ella logró su vigésimo tercer título de Grand Slam y así rebasó a Steffi Graff como líder en la era de los abiertos. Ahora, solo está un título por detrás de la máxima ganadora de todos los tiempos Margaret Court y con la forma en que jugó en Melbourne, sin perder un set, Serena, de 35 años, se ve muy bien como para lograr la hazaña durante este 2017.
“Nunca es suficiente, 23, 24, 25”, le dijo Serena a la multitud tras su triunfo. “Siento que de verdad elevé mi nivel de juego este año”.
Como un bono considerable este sábado, Serena también reconquistó el número 1 del ranking que tenía Angelique Kerber. El año pasado, la alemana venció a Serena Williams para conquistar el título.
Serena estuvo concentrada todo el juego, pero las hermanas intercambiaron un largo abrazo después de que Serena hiciera válido su primer punto para partido tras 1 hora y 22 minutos.
En ese momento, las competidoras en su interior pasaron a segundo plano.
“Tu triunfo siempre ha sido mi triunfo”, dijo Venus frente al público. “Todas las veces que yo no pude estar ahí, que no llegué ahí, tú estabas ahí”.
Más tarde, cerca de los vestidores, Serena intercambió abrazos con su equipo y su prometido, Ohanian, fundador de Reddit. Uno se pregunta si sus padres Oracene Price y Richard Williams -tan importantes para la carrera de sus hijas- lo presenciaron desde su casa en Estados Unidos.
Sus hijas estaban en otra final de Grand Slam, con Serena -basándonos en lo que sucedió en Melbourne- jugando su mejor tenis.