Mónaco (CNN) – Dijeron que estaba acabado, que “El Tigre” nunca volvería a rugir después de la grave lesión que sufrió en enero del 2014.
Radamel Falcao, uno de los jugadores mejor pagados de la historia de la Premier League inglesa. Radamel Falcao, anotador de tan sólo cinco goles en dos temporadas de la Premier League.
Así que los partidarios del fútbol inglés podrían haber sido perdonados por frotarse los ojos ante la incredulidad, en febrero, cuando superó a la defensa del Manchester City, haciendo a un lado a John Stones antes de vencer al guardameta Willy Caballero.
Ahí estaba: había vuelto a nacer en el escenario más grande de todos. De vuelta en el Mónaco y al mercado, tres años después de su más profundo bajón tras una rotura del ligamento cruzado anterior, liderando la formación del equipo más prolífico de Europa.
“Aprendes de todas las experiencias, tanto buenas como malas”, asegura Falcao al hablarle a CNN en una inusual entrevista, antes del encuentro por los cuartos cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Borussia Dortmund, que se tuvo que jugar este miércoles por el atentado contra el bus que transportaba a los alemanes en Dortmund y que dejó herido al defensa español Marc Bartra. “Mi tiempo en Inglaterra me dio experiencias de las que he aprendido y me han hecho mejorar”.
“Siempre estaba seguro de que cuando tuviera continuidad en partidos y minutos, mi forma volvería al nivel al que estaba acostumbrado y los goles, como consecuencia de esto, vendrían”.
Recuperar la confianza
Esa continuidad ha tenido consecuencias tanto para el fútbol francés como para el europeo, con el Mónaco al frente de la Ligue 1 y emergiendo como un tapado en la Liga de Campeones.
Falcao está anotando cada 87,5 minutos en la Ligue 1. En el Chelsea, lo hizo una vez cada 228 minutos y con el Manchester United una vez cada 322 minutos. Sólo Edison Cavani, del PSG; Lionel Messi, del Barcelona, y Robert Lewandowski, del Bayern Munich, pueden tener una mejor puntuación en las cinco mejores ligas de Europa esta temporada.
Habrá algunos que quieran demeritar tales logros (como alguna vez fue el caso Zlatan Ibrahimovic) al afirmar que la liga francesa representa un desafío menor.
Pues traten de decirle eso al técnico del Manchester City, Pep Guardiola, o al del Tottenham Hotspur, Mauricio Pochettino, ambos eliminados de la principal competición europea de clubes por el alto nivel del Mónaco esta temporada.
“Sólo se trataba de recuperar la confianza y sentirse como una parte importante del equipo”, aseguró Falcao, cuando se le pidió que explicara su resurgimiento. “Lo que definitivamente ha marcado la diferencia es que cada fin de semana juego y gano más minutos”. “Este club siempre me ha respaldado, me apoya, saben las cualidades que no sólo tengo como futbolista, sino como persona”.
Atado con Van Gaal
Falcao podría estar acercándose a estar en la forma que le permitió anotar 142 asombrosos goles en 178 apariciones durante sus años en el FC Porto portugués y el Atlético de Madrid, pero el colombiano es el primero en admitir que los tiempos oscuros todavía lo atormentan. Los períodos a préstamo del jugador de 31 años, en Old Trafford y Stamford Bridge, coincidieron con dos de las peores temporadas de esos clubes en épocas recientes.
Informando que ganaba más de 300.000 dólares por semana en el United y el Chelsea, los medios de comunicación no perdieron tiempo al comparar el caso del colombiano con los del español Fernando Torres y el ucraniano Andriy Shevchenko, fiascos caros en el pasado del club londinense. Falcao dice que estaba atado por las tácticas del extécnico del United, Louis Van Gaal, obligado a contribuir más a la construcción de juego y a “pasar menos tiempo en el área”, donde había sido tan letal.
En el Chelsea, José Mourinho prometió devolverle a Falcao a sus antiguos poderes, diciéndole a los periodistas que le “perjudicó” pensar que la gente consideraba la primera temporada en la Premier League del jugador como indicativa de su verdadera aptitud.
Pero después de firmar a Falcao en su regreso al Chelsea, en la temporada 2015-2016, ni siquiera el “Special One” portugués fue incapaz de redimir al colombiano, dejándolo ser titular en apenas un partido. Falcao, el alguna vez delantero más temido de Europa, estaba cada vez más desesperado y olvidado.
“Este tipo de experiencias adversas te enseñan y traté de aprender, de asimilar y de poner en práctica lo más posible. Para mí fue así: no dejé pasar ese momento sin ganar algo para mi vida”.
Falcao le dijo a CNN que recibió una serie de ofertas lucrativas de la Súper Liga china en la ventana de transferencia de invierno, pero los rechazó debido a los asuntos pendientes en Europa.
“Tengo algunos objetivos en los que me gustaría enfocarme y espero lograrlos”, dice Falcao. “Nunca se sabe el futuro. Tal vez aparezca una oportunidad para ir a jugar allí, en Estados Unidos o volver a Suramérica. Son situaciones que analizas junto con tu familia cuando surgen y tomarás la decisión correcta”.
Dolor por el Mundial
Muchos recuerdan las tribulaciones del colombiano en el United y el Chelsea, pero no se debe olvidar que los sueños de Falcao de jugar el Mundial de Brasil 2014 también fueron arruinados por la lesión en una rodilla.
“Es un sueño personal para mí poder jugar en la Copa del Mundo”, sonríe, con una Colombia que está en segundo lugar detrás de Brasil en las eliminatorias del Mundial de Rusia 2018.
“Para cualquier futbolista, representar al país es lo mejor, todos soñamos desde cuando somos niños el poder ponernos un día la camiseta de nuestro país, representarla y escuchar el himno”.
“Es un gran número de emociones que he tenido la oportunidad de disfrutar durante muchos años en mi carrera y me gustaría seguir haciéndolo, sobre todo en la Copa del Mundo en Rusia”.
Sueños de la Liga de Campeones
Ningún relato de redención estaría completo sin un final feliz. Falcao ha anotado cuatro goles en cuatro partidos de la Liga de Campeones esta temporada, y es Mónaco (no el Chelsea o el Manchester United) el que está en los cuartos de final.
Se enorgullece al considerar la “unidad y mentalidad” que tiene cada jugador, y sueña con añadir la medalla de ganador de la Liga de Campeones a los dos títulos de Liga Europa que ganó con el Porto y el Atlético de Madrid.
“Estamos muy emocionados por lo que está pasando y lo que estamos haciendo en este momento”, asegura. “Tenemos un rival muy fuerte en Dortmund. Nuestra esperanza es vencerlos y seguir adelante en la competición. Creo que seguramente con la misma convicción, el trabajo y la concentración que este equipo ha demostrado, todavía podemos mejorar como un grupo. Esperemos que esto sea suficiente para eliminar al Dortmund”.