(CNN) – El gobierno de Irán advirtió a sus ciudadanos el sábado sobre no celebrar reuniones públicas “ilegales”, luego de dos días de inusuales protestas antigubernamentales que se esparcieron a varias ciudades del país.
Las protestas, descritas como la mayor demostración pública de descontento en Irán desde el Movimiento Verde en 2009, surgieron en un contexto de aumentos a los precios de los alimentos y la gasolina.
Tres estudiantes fueron arrestados durante disturbios afuera de la Universidad de Teherán el sábado, dijo un funcionario del Ministerio de Ciencia a la agencia semioficial Iran Labor News Agency, ILNA. Dos ya fueron liberados, dijo la agencia.
Las protestas comenzaron el jueves en la ciudad de Mashhad, en el noreste del país, antes de extenderse el viernes a otras ciudades, como Teherán, Kermanshah, Arak, Qazvin, Khorramabad, Karaj y Sabzevar, de acuerdo con el primer vicepresidente Eshaq Jahangiri, citado por la agencia de noticias oficial IRNA. Los medios iraníes reportaron varios arrestos.
Los disturbios provocaron un choque de palabras entre Irán y Estados Unidos, luego de que el presidente de este país, Donald Trump, llamara a Teherán a respetar los derechos de los manifestantes y advirtiera que “el mundo está observando”.
El ministro del Interior de Irán, Abdolreza Rahmani Fazli, advirtió el sábado que cualquier grupo que deseara reunirse debería hacer una solicitud oficial y recibir un permiso.
En tanto, multitudes de simpatizantes del gobierno participaban el sábado en manifestaciones oficiales realizadas en todo el país, reportó la prensa estatal.