(CNN Español) – Seis personas fueron detenidas el lunes por la noche luego de un intento de atentado contra el actual secretario del Trabajo y exfiscal de Jalisco (México), Luis Carlos Náreja. Según informó la Fiscalía General del Estado (FGE) el mismo día, Nájera solo resultó herido levemente en una mano luego del atentado que tuvo lugar en Chapultepec, Guadalajara.
Tras el atentado se detuvo a un total de seis presuntos responsables, sin que se haya informado de sus identidades. “Dichos operativos continúan, ya que se presume la participación de al menos 12 personas en la agresión”, señaló el comunicado publicado en la tarde del lunes en Facebook. Los oficiales también se hicieron con “un cuantioso arsenal”, indicaron las autoridades. Durante la noche del lunes al martes no hubo avances en el operativo, según confirmó la Fiscalía a CNN en Español.
El ataque se produjo en la tarde del lunes, cuando el actual secretario de Trabajo salía de una reunión. En ese momento se le acercaron dos atacantes y comenzaron a disparar. “La mayoría de los impactos fueron contra la camioneta” blindada, relató él mismo en una rueda de prensa el lunes por la noche.
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Una patrulla de la Fuerza Única pasó por la zona justo en el momento en el que otro grupo de sicarios llegaba para continuar el ataque. “Al abrirse el segundo frente estos atacantes cobardemente huyeron, eran entre 15 y 20, y únicamente le hicieron frente mis tres escoltas y dos elementos de la Fuerza Única [cuerpo de Policía en Jalisco]. Todos huyeron”, dijo Nájera.
Por el ataque contra Náreja se reportaron un total de cuatro heridos y ningún muerto, informó la misma Fiscalía a través de sus cuentas oficiales en redes sociales. En el operativo también resultados heridos tres agentes de la Fuerza Única que trabajaban para solventando, estando uno de ellos grave, indicó la FGE.
“No nos detendremos hasta dar con el último integrante del grupo que intentó agredir contra la vida de nuestro secretario”, informó el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval. En una rueda de prensa el lunes por la noche, informó de que los detenidos “forman parte de un grupo delictivo”.
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“No hay alerta máxima ni código rojo”, dijo el gobernador, que pidió estar “en alerta ante las posibles reacciones de la delincuencia” tras el operativo luego del atentado. Sobre esto, mencionó el incendio provocado de un vehículo para impedir el paso de los coches de la Policía que buscaban a los culpables. Inicialmente se informó de dos coches, pero el martes el fiscal, Raúl Sánchez, informó de que uno de ellos sufrió un fallo mecánico.
“A la población le pido calma”, insistió Sandoval. “Sé que estos momentos nos arrebatan la tranquilidad, pero tengan la certeza de que vamos a salir adelante”.
El gobernador aseguró que los responsables del atentado eran miembros de “un grupo delictivo poderoso al que hemos contenido con toda nuestra fuerza y capacidad”. También explicó que se había puesto en contacto con las autoridades federales y locales para coordinar la respuesta al ataque. “El gobierno de la República me ha manifestado todo su apoyo”, dijo.
“El estado está trabajando a tope. Las calles de la ciudad están vigiladas. Mantengan la calma. Mantengámonos fuertes”, concluyó.
Sobre el motivo del ataque, el exfiscal aseguró que no había recibido amenazas previas. Lo achacó al trabajo previo que había realizado cuando estuvo a cargo de la Fiscalía: “Es lo único que se me ocurre”, dijo a los periodistas.