Stephany Lafountain, en una foto sin fecha publicada por el Departamento de Policía de Fairbanks.

(CNN) – Una mujer en Alaska, Estados Unidos, acusada de asesinar a sus dos hijas con casi dos años de diferencia, buscó en Internet formas de matar y, tras haberlo logrado, pidió ayuda médica para su hija pequeña, dijo la policía en Fairbanks.

Stephany Lafountain llamó a los servicios de emergencia de Fairbanks en noviembre de 2017, diciendo que su hija de 13 meses no respiraba. Una hora antes, dice la Policía, sus búsquedas en Internet incluyeron “formas de asfixiar”, “formas de matar humanos sin pruebas” y “Cómo: cometer el asesinato perfecto”.

MIRA: Acusan a una madre de matar a su bebé por drogas en la leche materna

La niña fue trasladada a un hospital pero murió cuatro días después.

Mientras investigaba, la Policía descubrió que, en septiembre de 2015, Lafountain también había pedido ayuda cuando su niña de 4 meses, que también era niña, no respiraba. La muerte de ese bebé no fue investigada como un homicidio en ese momento, pero las similitudes en los dos casos provocaron que los investigadores ampliaran su investigación, dijo la Policía en un comunicado de prensa.

“Esto es solo una tragedia inimaginable”, dijo el jefe de Policía de Fairbanks, Eric Jewkes, en una conferencia de prensa. “Tenemos dos bebés que fueron asesinadas por su madre. ¿Cómo podemos siquiera imaginar eso?”.

Lafountain, de 23 años, fue arrestada el jueves y está acusada de homicidio en primer y segundo grado de ambas niñas, identificadas por la policía solo como C.P. y J.L. Un defensor público no identificado fue designado el viernes para representarla, según el estado de caso publicado en Internet.

CNN no ha podido contactar al abogado de Lafountain.

MIRA: La decisión imposible para una madre: arriesgarse a ser violada por alimentar a su familia, o morir de hambre

J.L murió en 2017 por falta de oxígeno en el cerebro, y C.P., cuyo padre era de una relación anterior, tenía síntomas consistentes con asfixia, dijo la Policía. Las autopsias mostraron que ambas niñas estaban “completamente sanas, sin anormalidades genéticas, sin enfermedades y sin lesiones”.

En el curso de su investigación de nueve meses, la Policía descubrió que, una hora antes de pedir ayuda en el último incidente, las búsquedas en Internet de Lafountain también incluían “Mejores maneras de asfixiar”, “puede aparecer la asfixia en un informe de autopsia”, “16 pasos para matar a alguien y no ser atrapado”, “ahogamiento y forense” y “ahogamiento y asfixiar”.

El padre de J.L. estaba en el ejército y en servicio cuando Lafountain llamó a los servicios de emergencia a las 6:24 p.m. el 20 de noviembre de 2017. También llamó a la familia del padre, quienes intentaron resucitar a la niña.

Jewkes agradeció a la familia por guardar silencio durante los nueve meses que le llevó investigar el caso y arrestar a Lafountain.

La familia “sufrió en la oscuridad, en silencio”, dijo Jewkes. “Ellos cargaron solos con el proceso de duelo, y vamos a sacar esto a la luz y esperamos proporcionarles algún tipo de cierre”.