(CNN) – Se supone que la Jornada Mundial de la Juventud en Panamá es sobre los jóvenes, de todo el mundo, que celebran su fe católica con el papa. Pero este año está ocurriendo durante la mayor crisis del pontificado del papa Francisco y de la Iglesia católica moderna.
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La reunión tendrá lugar del 22 al 27 de enero en la ciudad de Panamá, y el papa llegará el día 23.
Panamá es 88% católico, según el Vaticano, y a pesar de la sombra de la controversia, esta es una especie de hogar para el papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano. Sus 10 discursos serán en su español nativo, lo que generalmente significa que podría improvisar en lugar de apegarse a los textos preparados.
Según el Vaticano, alrededor de 150.000 jóvenes se han inscrito hasta el momento, una participación mucho menor que las Jornadas Mundiales de la Juventud en 2013 en Río de Janeiro, Brasil y en 2016 en Cracovia, Polonia, que atrajeron a unos 3 millones cada una.
Se espera que el papa, como lo hace a menudo, entrelace la política en sus discursos, en particular temas como la migración, la corrupción, la violencia y el papel de la mujer, dijo un portavoz del Vaticano.
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¿Se reunirá el papa con los sobrevivientes del abuso del clero?
Dos sobrevivientes del abuso del clero de la cercana Costa Rica esperan reunirse con el papa Francisco en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud. Como es costumbre, el Vaticano no ha anunciado si el pontífice se reunirá con los sobrevivientes; pero aconsejó a los reporteros que el Papa podría abordar el tema.
Los sobrevivientes Michael Rodríguez y Anthony Venegas, ambos de Costa Rica, dicen que la cultura latinoamericana de “machismo” justifica las acciones de los abusadores y revictimiza a las víctimas, lo que hace que sea muy difícil para los sobrevivientes romper su silencio.
“En muchas ciudades, las personas no se atreven a hablar en contra de un sacerdote porque ven al sacerdote como un representante de Dios”, dijo Rodríguez a CNN.
“Es una forma en que el papa puede mostrar al mundo que cualquier víctima abusada … por un sacerdote, ya sea de un país grande o pequeño, tiene una voz ante el papa”.
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“Si el papa no se reúne con estas víctimas, ese es un mensaje que puede interpretarse como: no hables”, dijo Frank Mora, un experto en estudios latinoamericanos de la Universidad Internacional de Florida.
Mora dice que Francisco, como el primer pontífice latinoamericano, entiende las barreras que Rodríguez y Venegas han tenido que romper para hablar y las vulnerabilidades con las que viven todos los días para hacerlo.
Después de la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en 2013, el papa Francisco hizo su famoso comentario “quién soy yo para juzgar” a los homosexuales, que lo llevó a las primeras páginas de todo el mundo. ¿Podría el papa decir o hacer algo para hacer olas internacionales en Panamá de manera similar?
Patricia McGuire, presidenta de la Trinity Washington University en Washington, DC, dijo que así lo cree y que espera que Francisco llegue directamente a los jóvenes sobre la crisis de abuso sexual del clero.
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Pero McGuire es cautelosamente optimista porque dice que Francisco mismo sufre el mismo clericalismo que a menudo dice que está en la raíz de la crisis de abuso. Dependiendo de cómo se defina, el clericalismo a menudo se toma como una deferencia excesiva al sacerdocio masculino de la iglesia.
“Él vive en un mundo que está cerrado”, dijo McGuire a CNN. “Son hombres poderosos de la jerarquía”.
¿Cómo serán recibidos los jóvenes norteamericanos?
Esta es la primera Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Centroamérica, según el Vaticano. Las multitudes más pequeñas se deben en parte a que el evento se realiza normalmente durante los meses de verano, coincidiendo con el tiempo de vacaciones escolares.
Según la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, se espera que asistan alrededor de 12.000 personas de Estados Unidos, y algunos están preocupados por la forma en que serán recibidos, dado el debate divisivo de su país sobre la inmigración.
Amanda Pawelek asistió a la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia, Polonia, en 2016 y recuerda cómo los jóvenes de todo el mundo cantaban “EE.UU., EE. UU.”, cuando supieron que era de Texas.
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Esta vez, la joven de 26 años está nerviosa por la forma en que ella y otros estadounidenses serán recibidos en Panamá, dada la política y la atención centrada en la propuesta del presidente Donald Trump de construir un muro en la frontera sur del país con México.
Ariana Zepeda, de 17 años, también de San Antonio y que viaja con el mismo grupo que Pawelek, dice que el tema también estaba en su mente.
La coordinadora juvenil de su grupo, Rosa Balderas, dice que no le preocupa cómo serán recibidos en Panamá; pero ella planeaba guardar su sombrero de estrellas y rayas durante una escala en la Ciudad de México.
Balderas dice que en Panamá ella confía en que la fe superará la retórica política divisiva.
“Creo que todos allí verán que somos personas y Trump es otra persona”, dijo Balderas.
¿Qué más debes ver?
Para comentarios informales que podrían ser noticia, mantente atento el jueves durante la reunión del papa con los obispos de América Central en la Iglesia de San Francisco de Asís. Históricamente ha sido severo con sus hermanos obispos.
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La santa misa del domingo en el campo San Juan Pablo II, que tiene capacidad para 700.000 jóvenes, podría inspirar a Francisco a olvidar sus guiones y hablar desde el corazón.