Nota del editor: Carlos Alberto Montaner es escritor y analista político de CNN. Sus columnas se publican en decenas de diarios de España, Estados Unidos y América Latina. Montaner es, además, vicepresidente de la Internacional Liberal. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas del autor.
(CNN Español) – En Bolivia hay un pulso entre el gobierno interino presidido por Jeanine Áñez y el expresidente Evo Morales.
Morales pretende regresar al poder mediante una triquiñuela sin mucho sentido.
La norma constitucional dice que los parlamentarios deben aprobar la renuncia del presidente.
Como este trámite no se ha hecho y Morales tenía la mayoría en ambas cámaras, compuestas por 130 diputados y 36 senadores, supuestamente el expresidente ha cursado la orden de que no acepten su renuncia.
Sin embargo, Áñez, la presidente interina, ha acusado a Morales y a otros funcionarios ante los tribunales bolivianos por graves violaciones de la ley electoral y otros delitos. Presumiblemente, si Evo regresa sería encarcelado.
A mi juicio, Evo Morales ya está fuera del juego y por un tiempo largo no podrá volver a Bolivia.
No obstante, lo mejor que puede hacer el nuevo gobierno boliviano es seguir al pie de la letra la recomendación de Human Rights Foundation: utilizar la menor cantidad de fuerza para mantener la autoridad y convocar a elecciones inmediatamente.
¿Cuándo es inmediatamente? Tan pronto como el domingo 12 de enero.
¿Quiénes competirían?
Dado que no sería una segunda vuelta, porque Evo Morales no comparecería, se trataría de una primera vuelta, presumiblemente entre el expresidente Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho, el abogado y empresario de Santa Cruz que fue clave en el derrocamiento de Evo. Camacho tiene un gran apoyo popular en este momento.
Morales fue derrocado debido a su presunto fraude electoral, como denunció Luis Almagro, Secretario General de la OEA.
Es muy importante que cuanto antes se celebren esos comicios que sugiere Human Rights Foundation. Esto serviría para pacificar a Bolivia y pasar esta página dolorosa. Mientras más se demoren esas elecciones, peor será para el país.