(CNN) – Más de 6.000 migrantes han sido rechazados en la frontera entre EE.UU. y México desde que entró en vigor las nuevas restricciones fronterizas por el coronavirus, según los últimos datos del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés)
El comisionado interino del CBP, Mark Morgan, insistió el jueves en que las nuevas restricciones, que entraron en vigor el 21 de marzo, “no tienen que ver con la inmigración.”
“Se trata únicamente de enfermedades infecciosas y de salud pública”, dijo Morgan, quien declaró repetidamente: “No se trata de inmigración, punto. Se trata de la salud pública y la seguridad”.
El presidente Donald Trump ha sugerido previamente cerrar la frontera entre EE.UU. y México. A finales del mes pasado, la administración invocó las autoridades de los Centros de Control y Protección de Enfermedades que permitieron al país a expulsar inmediatamente a los migrantes encontrados en la frontera.
CBP está expulsando 80% de los migrantes encontrados en menos de dos horas. Como resultado, el número de personas bajo su custodia ha disminuido drásticamente. Morgan dijo el jueves que al momento hay menos de 100 personas en custodia. Eso es menos que las 20.000 personas en custodia en mayo del año pasado, durante el pico de la crisis de la frontera del sur.
Los migrantes detenidos en la frontera se someten a un nuevo proceso acelerado: se les toman los datos biométricos, se realizan evaluaciones médicas y luego los migrantes pueden ser regresados a México o su país de origen.
La “abrumadora mayoría” de los migrantes que son devueltos son encontrados cruzando ilegalmente, dijo Morgan a los reporteros, agregando que en los puertos de entrada se rechaza rápidamente a las personas que no tienen la autoridad o los documentos de viaje adecuados.
No obstante, a pesar de las nuevas medidas contra el coronavirus, el número de personas que cruzan ilegalmente la frontera sur se ha mantenido constante. En marzo, 29.953 personas fueron detenidas en la frontera, lo que supone una ligera disminución con respecto a las 30.074 personas detenidas en febrero.
La mayoría de los migrantes encontrados por la agencia son adultos solteros de México y personas de los países del Triángulo del Norte: Guatemala, El Salvador y Honduras, dijo Morgan. Los migrantes de otros países se han reducido a un “puñado” añadió, que es “muy diferente de lo que era hace unas pocas semanas”.
En el contexto de la pandemia, la administración de Trump ha tratado de avanzar con algunas de sus políticas más restrictivas que llevan luchado por ponerlas en práctica, incluyendo el bloqueo de la entrada a las personas que solicitan asilo.
Citando a las personas “no examinadas” y “no investigadas” que entran a EE.UU. a través de la frontera sur, Trump dijo el mes pasado que la frontera sería sellada “mayormente, e incluso más allá, pero sobre todo durante esta pandemia mundial”.
Eso también es cierto para los niños migrantes que llegan a la frontera entre EE.UU. y México solos. El CBP ha dicho que los niños están sujetos a las nuevas restricciones, marcando un cambio en la práctica de muchos años de referir a los niños al cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos.
Cuando se le preguntó si se ha suspendido el asilo y la protección legal para los niños no acompañados que llegaran a la frontera, Morgan no abordó directamente la pregunta, sino que dijo: “La enfermedad no conoce edad”.