(CNN) – El derrumbe parcial de un edificio residencial en Surfside, Miami, ha generado una gran atención en China, donde las imágenes de los trabajadores de rescate buscando entre los escombros han ocupado un lugar destacado en los medios de comunicación estatales y en los noticiarios nocturnos.
Pero en medio de esta intensa atención puesta sobre la tragedia ocurrida en Estados Unidos, muchos internautas chinos se han preguntado por qué un incidente mortal en su propio país ha recibido una cobertura mediática tan mínima y tan poca atención en las redes sociales.
En las primeras horas del viernes, un incendio arrasó una escuela de artes marciales en la provincia central de Henan, matando a 18 estudiantes -la mayoría niños- e hiriendo a otros 16, según una declaración del gobierno local y los informes de los medios de comunicación estatales.
En circunstancias normales, esta pérdida de vidas sería una gran tragedia que provocaría conmoción y entristecería a la nación, dominando los titulares de las noticias y las redes sociales durante días.
Sin embargo, a pocos días de celebrarse el centenario del Partido Comunista, una noticia tan terrible es lo último que el aparato de propaganda del partido quiere destacar, al menos cuando ocurre dentro de China.
Debate en redes sociales tras el derrumbe del edificio en Miami
En Weibo, la versión local y fuertemente censurada de Twitter, los usuarios dejaron comentarios airados preguntando por qué el incendio no estaba entre los 50 temas más destacados del día, y algunos acusaron a los censores de suprimir el debate e impedir que la noticia cobrara fuerza.
“¿Por qué un incidente con un número tan elevado de víctimas no se convirtió en trending topic? ¿Es porque el centenario del partido no permite noticias negativas?”, preguntó un usuario.
También en los medios de comunicación estatales la cobertura del incendio fue limitada, y la mayoría de ellos compartieron algunas noticias que se basaban principalmente en las declaraciones oficiales de las autoridades locales.
Muchos señalaron el contraste con la amplia y muy emotiva cobertura del derrumbe de un condominio cerca de Miami, que había sido uno de los principales temas en Weibo durante días.
Camino al centenario del Partido Comunista
El silencio comparativo que rodea al incendio habla del control intensivo y generalizado que ejercen los censores del gobierno en el período previo al centenario de la fundación del Partido Comunista, que se celebra el 1 de julio.
En el pasado, las autoridades chinas han redoblado la apuesta por el “mantenimiento de la estabilidad” antes de los grandes aniversarios, censurando rápidamente las voces y suprimiendo los incidentes considerados discordantes con la “energía positiva” antes de las celebraciones.
Pero el nivel de precaución en el camino al centenario ha alcanzado ahora nuevos niveles.
Dos semanas antes del aniversario, los funcionarios chinos celebraron una reunión de alto nivel y se comprometieron a “no escatimar esfuerzos para garantizar la seguridad de la producción, evitar con firmeza accidentes de diversa índole y crear una atmósfera segura y estable para la celebración del centenario” de la fundación del partido.
Actividades de riesgo suspendidas en China
Como resultado, las autoridades locales están en vilo, y algunas han llegado a suspender temporalmente las industrias de riesgo.
En Hubei, se suspendieron todas las operaciones de extracción de carbón entre el 15 de junio y el 5 de julio, tras la explosión de un gasoducto que mató a 25 personas el 13 de junio. En la vecina provincia de Jiangxi, se cerraron cinco minas de carbón del 21 de junio al 4 de julio, según Bloomberg.
Con la armonía asegurada en casa, el desastre de Florida, por otra parte, ha dado a los propagandistas chinos la oportunidad de redoblar la imagen de un Estados Unidos en declive.
En una columna titulada “Tras el derrumbe de un condominio en Miami, ¿solucionará EE.UU. la decreciente rendición de cuentas de parte de sus funcionarios?” Hu Xijin, redactor jefe del diario estatal Global Times, dijo que el desastre demostraba que “la capacidad de rescate de EE.UU. en situaciones de emergencia es mucho peor de lo que la gente cree”.