(CNN) – El máximo responsable de la lucha contra los incendios del país pide que todos se pongan manos a la obra para salvar vidas y educar a los estadounidenses sobre la seguridad de los calefactores este invierno.
Este domingo, la ciudad de Nueva York sufrió uno de los peores incendios de su historia, cuando el mal funcionamiento de un calefactor en un dormitorio provocó un incendio en un departamento del Bronx en el que murieron 17 personas, entre ellas ocho niños.
Aunque el incidente fue notablemente trágico, fue uno de los muchos incendios atribuidos a calefactores portátiles.
En promedio, los incendios provocados por calefactores portátiles causan 65 muertos y 150 heridos al año, según Lori Moore-Merrell, administradora de la Administración de Incendios de Estados Unidos. Estos son seis factores que, según los expertos en incendios, pueden marcar la diferencia a la hora de mantener el calor y la seguridad con un calefactor.
1. Colócalo al menos a un metro de cualquier cosa inflamable
La principal causa de que los calefactores se incendien es colocarlos demasiado cerca de objetos inflamables, según Moore-Merrell.
Se trata de una fuente de calor, por lo que colocar una unidad cerca de algo que pueda incendiarse, ya sea un sofá, cortinas o papeles, supone un riesgo de incendio, añadió.
También es importante mantener el calefactor en una superficie plana y estable, dijo el portavoz del Departamento de Bomberos de Houston Martee Boose.
2. No lo dejes desatendido
Es lógico que quieras que el calor siga funcionando durante todo el tiempo de frío, pero con los calefactores es un gran riesgo, dijeron los expertos.
Cuando no puedas prestar atención al calefactor, ya sea porque estás durmiendo o porque estás fuera de la habitación, debes apagarlo, dijo Moore-Merrell.
“Eso no siempre es algo agradable de oír, sobre todo cuando hace tanto frío como ahora”, dijo Moore-Merrell. “Podríamos pensar en ello como en una vela. No dejas una vela encendida cuando sales de la habitación, y lo mismo aplica para los calefactores”.
3. Mantenlos fuera del alcance de los niños y las mascotas
Al igual que no se deja una vela al alcance de los niños o de las mascotas curiosas, lo mismo ocurre con los calefactores, según Moore-Merrell.
Boose recomienda mantener el calefactor elevado donde los niños o las mascotas no puedan quemarse accidentalmente.
Si alguna vez has tenido un gato, sabrás que hay pocos lugares a los que no puedan llegar. En los hogares con acróbatas felinos, Boose sugirió colocar una barrera alrededor del calentador que pueda mantenerlos alejados y a la vez permitir la ventilación.
4. Enchúfalo directamente a la toma de corriente
Aparte del contacto con objetos inflamables, un gran riesgo de incendio es el uso de protectores de sobretensión con un calefactor ambiental, dijo Boose.
“Si lo conectas directamente en la pared, sabes que está clasificado para esa toma de corriente”, dijo Boose. Un protector de sobretensión puede no estar equipado para manejar la potencia necesaria para el calefactor, y puede causar un incendio si se abruma, dijo Boose.
5. Asegúrate de tener una alarma de humo y monóxido de carbono en funcionamiento
Incluso con todos los cuidados posibles, a veces las cosas pueden salir mal. La primera línea de defensa, dijo Boose, es mantener las alarmas de incendio en funcionamiento.
Es importante probar las alarmas de incendio y de monóxido de carbono cada mes para asegurarse de que funcionan, dijo Boose. También hay que comprobar y cambiar las pilas. El monóxido de carbono es incoloro e inodoro, pero puede ser peligroso, lo que significa que puede ser difícil saber cuándo está dañando a los que están en la casa.
El monóxido de carbono puede ser una gran preocupación en los meses de invierno. Las personas que no tienen calefacción central a menudo tratan de mantenerse calientes usando su horno, sentándose en su auto o prendiendo sus parrillas, todo lo cual Boose dijo que no debe hacer porque es peligroso.
6. Mantente atento a las señales de mal funcionamiento
Afortunadamente, los calefactores más modernos suelen tener funciones de seguridad que hacen que se apaguen cuando no funcionan correctamente, dijo Moore-Merrell, pero los modelos más antiguos no funcionan así.
“No tenemos forma de saber dónde están esos aparatos más antiguos”, añadió.
Una señal importante a la que hay que prestar atención es el color de las llamas de los calentadores de gas. Una llama azul es normal, pero una llama naranja significa que no está funcionando correctamente y debe ser apagado inmediatamente, dijo Boose.
Mantenerse caliente durante el invierno es importante tanto por seguridad como por comodidad, y para algunas personas los calefactores pueden ser la mejor manera de conseguirlo. Tomar precauciones y utilizarlos adecuadamente puede añadir otra capa de confort, sabiendo que se está siendo lo más seguro posible.