Hong Kong (CNN) – Los propietarios de un emblemático restaurante flotante de Hong Kong, que fue noticia en todo el mundo tras conocerse que se había hundido en el mar, parecieron retractarse este jueves de las afirmaciones anteriores de que no era posible salvarlo, insistiendo en que el barco “seguía en las aguas” cerca de las islas Paracel, mientras crecen los llamamientos para que se investigue a fondo el incidente.
El Jumbo Kingdom, un barco de 80 metros de eslora y tres pisos de altura con el estilo de un palacio imperial chino, se encontró con “condiciones adversas” el pasado fin de semana mientras era remolcado en el mar de China Meridional. “El agua entró pronto antes de que se comenzara a volcar”, dijeron inicialmente sus propietarios en un comunicado el lunes.
“La profundidad del agua en el lugar es de más de 1.000 metros, lo que hace extremadamente difícil llevar a cabo las labores de salvamento”, decía el comunicado.
Pero el jueves, ante la presión de las autoridades para que revelaran las circunstancias del aparente naufragio, el propietario del buque, Aberdeen Restaurant Enterprises Limited, dijo en un comunicado que el buque y el remolcador que lo acompañaba seguían en aguas cercanas a las islas Paracel (conocidas como islas Xisha en China).
El comunicado, facilitado al gobierno de Hong Kong, no indicaba si el buque seguía a flote o si se había separado de su remolcador.
El aparente giro en el mensaje se produce después de que el Departamento de Marina de Hong Kong pidiera al grupo de restaurantes que presentara un informe escrito sobre el incidente como parte de una investigación inicial.
Un portavoz de Aberdeen Restaurant Enterprises Limited dijo este viernes a CNN que siempre había utilizado el término “vuelco” para describir el incidente y que nunca había afirmado que el barco se hubiera hundido.
Cuando se le preguntó si esto contradecía las declaraciones anteriores, el portavoz dijo que la empresa estaba obligada a “informar de la profundidad de las aguas donde (el incidente) tuvo lugar”, y se negó a responder si esto significaba que el barco era rescatable o que permanecía a flote.
Icono histórico
El que fuera el restaurante flotante más grande del mundo, Jumbo Kingdom cerró sus puertas indefinidamente en 2020, ya que el doble golpe de las protestas en la ciudad y la pandemia contribuyeron a pérdidas de más de US$ 13 millones.
El restaurante, una de las principales atracciones turísticas de Hong Kong, había servido de escenario para numerosas películas, como “Enter the Dragon”, protagonizada por Bruce Lee, y “James Bond: The Man with the Golden Gun”. También ha tenido entre sus comensales a personalidades como la reina Isabel II, Jimmy Carter y Tom Cruise.
Se habían presentado varias propuestas para salvar el restaurante, pero su elevado costo de mantenimiento había disuadido a los posibles inversores, y la jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, también descartó un posible rescate gubernamental para salvar la atracción.
El barco fue remolcado fuera de Hong Kong el 14 de junio, tras casi medio siglo amarrado en las aguas del suroeste de la ciudad.
Aunque los propietarios se negaron inicialmente a declarar su destino, el Departamento de Marina reveló posteriormente que iba a ser llevado a un astillero en Camboya.
La noticia de su hundimiento fue recibida con consternación en Internet, y muchos usuarios de las redes sociales de Hong Kong lamentaron el final poco elegante de uno de los iconos históricos más reconocidos de la ciudad.
El legislador en materia de turismo Perry Yiu Pak-leung dijo que el hundimiento del Jumbo Kingdom era una pérdida para el patrimonio de la ciudad.
“Hong Kong debería tomar esto como una lección. El gobierno, los conservacionistas, los historiadores y el sector comercial deberían trabajar juntos para proteger y hacer un buen uso de estos lugares [históricos]”, dijo. “Nos hemos estancado demasiado tiempo”.
Piden una investigación
Los legisladores de Hong Kong piden ahora al gobierno que inicie una investigación más exhaustiva.
“Necesitamos saber si la empresa de remolcadores incurrió en alguna mala práctica o error humano en el mar cuando remolcó el buque Jumbo Kingdom”, declaró Tik Chi-yuen, presidente del partido político Third Side.
Stephen Li, profesor del Departamento de Logística y Estudios Marítimos de la Universidad Politécnica de Hong Kong, afirmó que es “bastante infrecuente” que un barco se hunda simplemente por el mal tiempo, y añadió que el transporte marítimo es “muy seguro hoy en día” gracias a los avances en la tecnología de navegación.
Pero la investigación podría llevar años, dijo Li, sobre todo porque el suceso se produjo fuera de la jurisdicción de la ciudad, en aguas internacionales.
El Departamento de Marina dijo en un comunicado este miércoles que el propietario del barco había contratado a una agencia para inspeccionar la embarcación y asegurarse de que estaba en condiciones de navegar antes de ser remolcada.
No está claro si el barco estaba asegurado, lo que podría complicar las operaciones de salvamento.
Andrew Brooker, director general de la empresa de seguros marítimos Latitude Brokers, con sede en Hong Kong, dijo que era “increíblemente improbable” que el buque estuviera asegurado contra pérdidas o daños.
“Al mercado de los seguros marítimos no le gusta [asumir el riesgo de] barcazas de 50 años remolcadas a través de 1.000 kilómetros de mar abierto en la temporada de tifones”, dijo.
Brooker añadió que los propietarios del Jumbo Kingdom no habrían estado obligados legalmente a asegurar el buque fuera de las aguas de Hong Kong.
– Maggie Hiufu Wong y Jessie Yeung contribuyeron con este reportaje.