CNNE 1080052 - cientificos hallan orcas cazadoras de grandes mamiferos
Descubren 150 orcas con diferentes comportamientos: comen tiburones y ballenas a gran profundidad
00:43 - Fuente: CNN

(CNN) – Una pareja de orcas ha alejado a los grandes tiburones blancos de un tramo de la costa sudafricana luego de matar a cinco tiburones en un periodo de pocos meses en 2017, según un nuevo estudio.

Los tiburones blancos solían dominar zonas de la costa de Gansbaai, a unos 100 kilómetros al este de Ciudad del Cabo, pero en los últimos años los tiburones las han evitado, según un artículo publicado el miércoles en la revista African Journal of Marine Science.

Una pareja de orcas persigue a los tiburones blancos en la costa Gansbaai de Sudáfrica.

La costa de Gansbaai fue una vez un lugar popular para el avistamiento de tiburones blancos, pero han disminuido notablemente en los últimos años. El estudio utilizó datos de avistamientos y marcajes a largo plazo para demostrar que los tiburones blancos han sido expulsados por las orcas, a veces conocidas como ballenas asesinas.

Los investigadores también analizaron cinco cadáveres de tiburón blanco encontrados en la costa, cuatro de ellos con el hígado, rico en nutrientes, extraído, y uno con el corazón también extraído. Todos tenían heridas hechas por la misma pareja de orcas, que probablemente han matado a más tiburones blancos, dicen los investigadores.

El estudio siguió a 14 tiburones blancos durante cinco años y medio, y descubrió que huían de la zona cuando las orcas estaban allí. Los investigadores creen que la sensación de miedo de los tiburones desencadena una rápida migración masiva a largo plazo cuando saben que el depredador está presente.

“Inicialmente, tras un ataque de orcas en Gansbaai, los tiburones blancos individuales no aparecieron durante semanas o meses”, dijo la autora principal del estudio, Alison Towner, bióloga principal de tiburones blancos en el Dyer Island Conservation Trust, en un comunicado de prensa.

Towner cree que se trata de una “evitación a gran escala”, similar a la forma en que los perros salvajes del Serengeti evitan ciertas zonas cuando hay leones.

“Cuanto más frecuentan las orcas estos lugares, más tiempo se mantienen alejados los tiburones blancos”, añadió.

Un ecosistema cambiante

Antes de que las orcas empezaran a atacar a los tiburones blancos, los tiburones solo se habían ausentado de Gansbaai durante una semana en 2007 y tres semanas en 2016.

Esto significa que las ausencias prolongadas presenciadas por los investigadores no tienen precedentes, y está cambiando el ecosistema de la zona.

Los tiburones cobrizos se han convertido en los nuevos depredadores de rango medio en la zona, dijo Towner.

“Estos tiburones cobrizos también están siendo atacados por las orcas, que indican un nivel de experiencia y habilidad en la caza de grandes tiburones”, dijo Towner, quien añadió que los lobos marinos ahora están depredando a los pingüinos africanos, que están en peligro de extinción.

“Ese es un impacto descendente, también tenemos presiones tróficas ‘ascendentes’ por la eliminación extensiva de abulón, que deambula por los bosques de algas marinas que conectan a estas especies”, añadió.

“En pocas palabras, aunque se trata de una hipótesis por ahora, la presión que puede soportar un ecosistema tiene un límite, y es probable que los impactos de la eliminación de tiburones por parte de las orcas tengan un alcance mucho mayor”.

Un “declive abrupto”

Towner también cree que las orcas son cada vez más frecuentes en la costa de Sudáfrica, y esta pareja en particular podría formar parte de un grupo poco común de “come tiburones”.

“Este cambio en el comportamiento de ambos depredadores superiores podría estar relacionado con una disminución de las poblaciones de presas, incluidos los peces y los tiburones, lo que provocaría cambios en su patrón de distribución”, dijo.

Las orcas se centran en los tiburones más jóvenes, dijo, lo que podría tener un mayor impacto en las vulnerables poblaciones de tiburones blancos, ya que éstos crecen lentamente y tardan en madurar.

Los investigadores reconocen que las temperaturas de la superficie del mar también podrían influir en los avistamientos de tiburones blancos, pero “no se puede explicar el descenso inmediato y abrupto de los avistamientos a principios de 2017 y los períodos prolongados y crecientes de ausencia”.

Otras explicaciones podrían incluir la pesca directa de los tiburones blancos o la disminución del número de presas debido a la pesca, añaden, pero aunque esto puede “contribuir potencialmente a una disminución general del número de tiburones blancos en Sudáfrica, es poco probable que expliquen la repentina disminución localizada”.

Otro estudio de 2016 sugirió que solo quedaban unos pocos cientos de tiburones blancos en Sudáfrica, en comparación con las estimaciones anteriores de unos pocos miles.

Además, el análisis de ADN del tejido de los tiburones demostró que la diversidad genética de los blancos de Sudáfrica es excepcionalmente baja, lo que los hace más susceptibles a los impactos externos como enfermedades o cambios ambientales.