(CNN) – Aferrarse a las cosas de un ex puede resultar rentable más adelante, al menos si tu ex resulta ser el hombre más rico del mundo.
La exnovia del empresario tecnológico Elon Musk puso a subasta un alijo de fotos y recuerdos de su relación con el multimillonario.
Jennifer Gwynne, la novia universitaria de Musk, está vendiendo los recuerdos a través de RR Auction, con sede en Boston.
Gwynne y Musk comenzaron a salir en 1994 cuando ambos trabajaban como asesores residentes en un dormitorio universitario, según un comunicado de prensa que RR Auction compartió con CNN. Poco después de graduarse de la Universidad de Pensilvania, Musk comenzó un programa de doctorado en Stanford, pero lo abandonó para lanzar su primera startup, Zip2.
El lote incluye 18 fotos inocentes del empresario cuando era estudiante de economía con cara de niño en la Universidad de Pensilvania, así como varios otros recuerdos del tiempo que Musk y Gwynne pasaron juntos.
Las fotos muestran al multimillonario luciendo como un estudiante universitario normal antes de su meteórico ascenso al éxito: holgazaneando en un dormitorio, pasando el rato con sus compañeros asesores residentes y abrazando a su novia.
El artículo con la oferta actual más alta es una tarjeta de cumpleaños firmada, seguida de un collar que le regalaron a Gwynne en su cumpleaños.
“Feliz cumpleaños, Jennifer (también conocida como Boo-Boo), con amor, Elon”, dice la nota. Hasta el domingo por la mañana, la oferta más alta era de casi US$ 7.000. Se espera que la tarjeta se venda por más de US$ 10.000, según RR.
El collar de oro incluye una esmeralda de la mina de esmeraldas de Zambia propiedad del padre de Musk, Errol, un acaudalado promotor inmobiliario e ingeniero sudafricano.
“Cuando fuimos a visitar a la madre de Elon en Toronto durante las vacaciones de Navidad de 1994, Elon me dio tanto la pequeña nota de ‘amor, amor, amor’ como el collar”, dijo Gwynne en el comunicado de RR. “Su madre tenía varios de estos collares en un estuche en su dormitorio, y Elon me dijo que eran de la mina de esmeraldas de su padre en Sudáfrica. Sacó uno del estuche. Y porque no le había regalado nada como regalo de Navidad (y me sentí muy culpable por eso), dijo que consideraríamos el collar como un regalo anticipado de cumpleaños para mí”.
“Usé el collar durante varios años de forma intermitente, pero la mayor parte del tiempo ha estado en mi joyero durante los últimos diez años (siempre recordándome a Elon, por supuesto)”.
El collar también viene con dos fotos, una de Musk y Gwynne con la madre de Musk, la modelo Maye Musk, y otra de Musk y Gwynne en una ceremonia de fin de año en 1995.
Los grandes aficionados de Tesla pueden hacer una oferta por una pieza de memorabilia de Musk hasta el miércoles, cuando se cierra la subasta.