(CNN) – La Reserva Federal de Estados Unidos anunció este miércoles un aumento del 0,75% en las tasas de interés por cuarta vez consecutiva, como parte de su agresiva estrategia por reducir la inflación descontrolada que afecta la economía del país.
El fuerte incremento deja la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal con un nuevo rango objetivo del 3,75% a 4%. Se trata de la tasa más alta la Fed desde enero de 2008.
La decisión, que llega tras una reunión de dos días del Comité Federal de Mercado Abierto, representa la medida más fuerte de la Reserva Federal desde 1980. Además, probablemente complicará el panorama económico de millones de empresas y hogares estadounidenses al impulsar aún más el costo de los préstamos.
También existe la posibilidad de que desencadene una recesión.
Aunque el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha enfatizado en que la inflación persistente y arraigada representa un sufrimiento económico mayor al de una recesión, también reconoció las dificultades que se desprenden del endurecimiento de la política monetaria.
“Ojalá hubiera una forma indolora de hacerlo. No existe”, dijo en septiembre pasado.
En su anuncio de este miércoles, la Fed incluyó una nueva sección, algo inusual pues el banco suele repetir el mismo lenguaje en cada reporte. El Comité Federal de Mercado Abierto, la división que elabora las políticas del banco central, expresó que “anticipa que los aumentos continuos en el rango objetivo serán apropiados para lograr una posición de política monetaria que sea lo suficientemente restrictiva para devolver la inflación al 2% con el paso del tiempo”.
Los expertos podrían interpretar que la adición de “con el paso del tiempo” a los índices de inflación podría significar que la Fed se alejaría de los aumentos de tasas agresivos hacia aumentos más pequeños, pero a más largo plazo.
Además, el comunicado señala que: “Al determinar el ritmo de futuros aumentos en el rango objetivo, el Comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, los rezagos con los que la política monetaria afecta a la actividad económica y a la inflación, y los factores económicos y financieros”.
El nuevo lenguaje que utiliza la Fed también podría allanar el camino para una eventual flexibilización de las tasas de interés, pues re onoce que la política monetaria podría estar enfriando efectivamente la economía incluso cuando los datos económicos —que a menudo operan con retraso— indican un fuerte crecimiento.
Wall Street también podría considerar que ese lenguaje responde a la ola críticas contra la Fed por estar excediéndose con los aumentos de tasas de interés agresivamente altas, y con el subsecuente daño innecesario a la economía.
Los datos recientes solo subrayan el aspecto de “elige tu propia aventura” de la economía estadounidense: las tasas hipotecarias en niveles no vistos durante casi 20 años están comenzando a ahogar el mercado inmobiliario, mientras que las ventas de viviendas de construcción nueva cayeron un 10,9% en septiembre con respecto a agosto y un 17,6% respecto al año anterior.
Sin embargo, algunas presiones inflacionarias están disminuyendo. Los sueldos y salarios aumentaron un 1,2% en el tercer trimestre, frente al 1,6% del segundo, según el Índice de Coste del Empleo.
Y, a pesar de todo, el mercado laboral se ha mantenido ajustado. Las ofertas de trabajo aumentaron inesperadamente en septiembre, lo que indica que hay 1,9 ofertas de trabajo por cada trabajador disponible. Se espera que el próximo informe de empleos de este viernes muestre que la economía agregó otros 205.000 puestos en octubre, menos que el mes pasado pero aún históricamente alto.