(CNN) – Las autoridades buscan a una madre de Colorado que es sospechosa de matar a dos de sus hijos e intentar matar a un tercero después de que la policía respondió inicialmente a un reporte de robo en su casa.
Se emitió una orden de arresto contra Kimberlee Singler por cargos de homicidio e intento de homicidio, después de que su hijo de 7 años y su hija de 9 años fueran encontrados muertos en la casa y su hija de 11 años fuera enviada al hospital para ser tratada por lesiones, según un comunicado de prensa del Departamento de Policía de Colorado Springs (CSPD, por sus siglas en inglés).
El Grupo de Trabajo sobre Fugitivos y Delincuentes Violentos del departamento busca a Singler, de 35 años, desde que se emitió la orden el martes, informó la policía. El FBI colabora con la búsqueda, dijo a CNN un funcionario de asuntos públicos de la oficina del FBI en Denver.
“Tenemos algunas ideas sobre su ubicación, pero reconocemos que podría estar en cualquier lugar”, dijo el funcionario de información pública Ira Cronin.
Inicialmente, los agentes acudieron a la casa de Singler poco después de la medianoche del 19 de diciembre, al recibir una llamada al 911 sobre un robo. La llamada al 911 provino del interior de la casa, dijo Cronin a CNN, aunque no pudo confirmar quién hizo la llamada.
“Los agentes llegaron al lugar y observaron a una mujer adulta y a una niña de 11 años que habían sufrido heridas”, dijo el CSPD en el comunicado de prensa. “Otros dos menores, una niña de 9 años y un niño de 7, fueron encontrados fallecidos en la residencia”.
La madre y su hija sobreviviente fueron llevadas a un hospital, dijo Cronin.
Singler fue considerada originalmente una víctima, según el informe inicial de robo, pero se convirtió en sospechosa “en el transcurso de la investigación”, aseguró Cronin. “Hasta que tuvimos una causa probable no pudimos retenerla por ningún motivo”.
Posteriormente se determinó que el robo era “infundado”, de acuerdo con el comunicado.
Inicialmente, Singler cooperó con la policía después de su alta del hospital. En algún momento, ella dejó de cooperar y la policía no pudo ponerse en contacto con ella, afirmó Cronin.
Su hija de 11 años fue dada de alta del hospital unos días después del incidente. Se está recuperando de sus heridas y no está con su madre, añadió Cronin.
Singler fue vista por última vez el 23 de diciembre, según el comunicado. Enfrenta cuatro cargos de homicidio premeditado y dos cargos de intento de homicidio. Los cargos por cada presunto delito se duplicaron debido a que todos los niños eran menores de 12 años, establece el comunicado.
La fianza de Singler se fija en US$ 10 millones.
“Los detalles de la orden de arresto están actualmente sellados bajo orden judicial y se espera que sean revelados más adelante”, dijo la policía en el comunicado.